Max Verstappen cruzó la línea de meta final del GP de Australia en primera posición. Lo hizo tras jugarse ese triunfo por unos pocos centímetros, con una sangre fría digna del campeón que es.
El piloto neerlandés parecía estar mal colocado en la primera plaza de arranque en la salida en parado final que se realizó en Melbourne a falta de dos giros para la conclusión de la cita, tras una bandera roja provocada por la pérdida de una rueda del coche de Magnussen. Pero no. El reglamento es claro, indica que las ruedas no pueden sobrepasar la línea blanca del cajón que delimita su posición de salida. Si la rueda toca la línea, se considera dentro de posición. Y Max fue al límite del reglamento.
Lo hizo, al juzgar por las imágenes, de forma totalmente consciente para maximizar sus opciones de mantener la primera posición ante Hamilton en esa resalida. Se paró en primera instancia y adelantó su posición lo justo de nuevo para dejar sus ruedas encima de la línea blanca para defenderse ante Lewis. Se la jugó. Estuvo avispado y fue osado. Así es Verstappen. Al límite.
De haber calculado mal su posición y haber superado la línea blanca, a Max le hubieran caído 5 segundos de penalización. Eso, en una carrera que terminó detrás del ‘Safety Car’, con el grupo de coches compactado, le hubiera llevado a ocupar la 7ª plaza. Ello le podía haber entregado la victoria a Lewis Hamilton, la segunda posición a Alonso, el podio al Haas de Hülkenberg y el liderato del Mundial Pérez. Mucho en juego. Pero le dio igual. Controló la situación con un temple enorme y nada de eso ocurrirá.
Hay que recordar que la FIA impuso dos sanciones por algo similar en las dos primeras carreras. Le ocurrió a Esteban Ocon en la primera cita de Bahrein, con 5 segundos de penalización. También a Fernando Alonso en la segunda carrera del año por estar ubicado fuera del cajetín de salida con una de sus ruedas, pero sin estar adelantado. Aquello le costó al asturiano 5 segundos de penalización. Pero Max no incumplió el reglamento. Sus ruedas tocaron la línea.
Gran Premio de Fórmula Uno de Australia, en Melbourne