Vettel, el primero en probar el nuevo Ferrari SF1000

Ferrari no se puede permitir más errores esta temporada. Y tras presentar su nuevo SF1000 el pasado lunes como un coche “completamente nuevo”, como dijo el jefe del equipo Mattia Binotto en la presentación realizada por la ‘Scuderia del Cavallino Rampante’
, el cuadro italiano deberá trabajar más que nunca en los test de pretemporada de Barcelona (del 19 al 21 de febrero y del 26 al 28 de febrero) a partir de la próxima semana para comprobar que el duro trabajo realizado durante todo el invierno en su fábrica ha valido la pena. El conjunto de Maranello no estuvo a la altura de Mercedes el pasado año. Solo se mostró superior en los circuitos de pura velocidad debido a una criticada y polémica mejora de potencia de su motor. Pero en el resto de trazados, el coche rojo sufrió de falta de agarre, especialmente en curvas lentas y trazados revirados, con la degradación de los neumáticos y a la hora de calentarlos, además de terminar de aliñar el desaguisado con fallos en la estrategia, polémicas entre sus dos pilotos con controvertidas órdenes de equipo y situaciones delicadas, malos pit stop y fallos de fiabilidad. Y así es imposible ganar un Mundial. En Ferrari lo sabían, y por ello han trabajado durante los últimos meses en la creación de un monoplaza que les permita dar el paso al frente definitivo y pelear ante Mercedes de tú a tú, sin arrugarse. Todo, para llegar a los test de Barcelona y poder confirmar sus sensaciones.

Los ‘tifosi’ y prácticamente toda Italia tienen puestas todas sus esperanzas en el nuevo SF1000, un concepto de coche más extremo y que espera que mejore todos los puntos débiles de su predecesor, el SF90. Especialmente, se han centrado en mejorar la fiabilidad de sus piezas, uno de sus grandes males del pasado curso. Y por ello, será clave comprobar que la durabilidad de su coche ha progresado dando muchas vueltas a la pista catalana sin tener problemas durante los 6 días de test oficiales de Barcelona.

No obstante, habrá que hacer memoria con Ferrari para no tropezar con la misma piedra que el pasado año, cuando los italianos se marcharon de los test como los grandes favoritos tras ser más rápidos que los Mercedes. Ilusión que no duró ni una carrera. Será el circuito de Albert Park, en el GP de Australia, el que dé las primeras grandes pistas de cómo realmente funciona el Ferrari y si puede batallar realmente ante Mercedes por el título, aunque en los test Ferrari deberá confirmar su progreso en todas las áreas con sus dos pilotos al volante,

Charles Leclerc y Sebastian Vettel.

El primero en hacerlo y en obtener sus primeras sensaciones del nuevo Ferrari será
Sebastian Vettel
, algo que podría verse como una declaración de intenciones de los de Maranello, que se niegan a quitarle galones a Sebastian antes de comprobar su rendimiento en pista este año.

El alemán será el encargado de estrenar el Ferrari el día 19 en las sesiones de mañana y tarde, y también pilotará el día 20 por la mañana para finalmente dejar el relevo a Charles Leclerc, que probará por primera vez el SF1000 el día 20 por la tarde y durante todo el último día de primera semana de pruebas en Montmeló.

Charles Leclerc, con sus resultados en su primer curso en Ferrari, puso en duda el liderazgo de Vettel en el conjunto de Maranello, pero el cuadro italiano se resiste en darle la capitanía al monegasco y quiere seguir confiando en que Sebastian recupere su mejor nivel con un coche diferente como este SF1000.

La pista dictará sentencia, pero de momento, dejar las cosas como el pasado año, sin invertir los turnos de sus pilotos en los test respecto al test de 2019, es tan solo síntoma de lo que quiere reflejar Ferrari de puertas hacia fuera: absoluta normalidad antes del inicio de temporada. Y una vez empiecen las carreras, tan solo los resultados, las posiciones concretas de carrera o la clasificación general de ambos dictaminarán si debe haber un líder claro que hoy por hoy bien podría ser Charles.