Fue la última en llegar el pasado verano al FC Barcelona y con ella quisimos despedir 2022, un año en que Keira Walsh (Rochdale, Inglaterra, 8 de abril de 1997) se proclamó campeona de la Eurocopa con Inglaterra y dejó Manchester y el City para firmar por el Barça. Puntual, predispuesta y muy sonriente, la inglesa repasó todo lo que ha vivido en los últimos doce meses.
Si hace un año le dicen que acabará 2022 como campeona de Europa con Inglaterra y como jugadora del FC Barcelona, ¿qué hubiera dicho?
Seguramente no me lo hubiera creído. Ganar la Eurocopa fue un sueño y más hacerlo en casa. No hubiera pensado que era imposible pero había muy buenos equipos también, y luego firmar por el Barça también era un sueño. 2022 ha sido un gran año.
¿Qué ha cambiado en su vida en el último año?
Obviamente vivir aquí es una vida diferente, estoy disfrutando mucho, el clima es muy bueno, cuando acabo de entrenar tengo más vida social, puedo ir a la playa, Barcelona es una ciudad muy bonita y todo va muy bien.
¿Recuerda la primera vez que le dicen que el Barça la quiere?
Sí, fue después de la Eurocopa, me quedé en shock, no me lo esperaba, aquí hay grandes mediocampistas y no me pensaba que el Barça me quisiera fichar, pero así fue y estoy muy muy feliz.
¿A quién se lo contó primero?
Se lo dije a mamá y papá, mi padre además es un gran fan del fútbol español y en particular del Barcelona, se puso muy contento y me animó a venir aquí.
¿Fue difícil dejar su ciudad después de toda una vida allí?
Sí, porque más que irme de un club era irme del club de mi vida y de mi familia y en el que estaba desde los nueve años. Era el único estilo de fútbol que conocía y no fue una decisión fácil pero el Barça era uno de los únicos equipos, por no decir el único, por el que habría dejado Manchester.
¿Cómo recuerda el primer día de su nueva vida en Barcelona?
Salí del avión y vinimos en coche a la Ciutat Esportiva y conocí a Jonatan y al resto del ‘staff’y a Markel. Fuimos a comer y había fideuá y al día siguiente ya comencé a entrenar. Estaba muy nerviosa porque obviamente en el Barça hay jugadoras muy buenas fue emocionante y las chicas me ayudaron mucho, fue una sesión muy intensa porque hacía mucho calor.
¿Cuál es su rutina en Barcelona?
Salir a pasear con mi perro, hacer un brunch o tomar un café, hacer un poco de deporte, los primeros días hice turismo y conocí algunas playas, pero ahora estoy inmersa en la rutina y centrada en el fútbol.
¿Qué le gustó más?
El pueblo en el que vivo (Sant Just) es un pueblo pequeño, donde todo el mundo es muy cercano y hay unas cafeterías muy bonitas. Y puedo ir andando a entrenar. Me gusta mucho.
¿Con qué compañeras pasa más tiempo fuera del campo?
Quizá Ingrid (Engen) o Aitana. Las dos en particular me han ayudado mucho y también las dos juegan de mediocampistas también. En el campo nos comunicamos muy bien y fuera podemos ir a tomar algo, a comer o tomar un café y eso es muy bonito.
¿Recuerda algún consejo en especial en sus primeros días en Barcelona?
Joanatan me dijo que estuviese relajada y disfrutase. Que en los partidos desde entonces hasta Navidad que me centrase en sentirme cómoda y disfrutar, y hacer aquí lo que hacía en Inglaterra, ser yo misma.
¿Qué le sorprendió más al llegar?
La intensidad de los entrenamientos. Las chicas están muy bien preparadas físicamente. La gente cuando habla de fútbol español habla solo de técnica o táctica pero creo que físicamente son muy fuertes y la intensidad me sorprendió.
Viene de un estilo muy diferente, ¿se siente más adaptada al Barça?
Sí, me siento más adaptada, todavía tengo que mejorar pero al mismo tiempo puedo aportar cosas que aportaba en Inglaterra, creo que puedo aportar mucho.
¿Con qué compañera se entiende más dentro del campo?
Aitana y Patri. Su manera de entender y jugar al fútbol es de las mejores del mundo. Cuando recibo el balón y tengo que mirarlas es mucho más fácil. Jugar con ellas me hace mejorar mucho.
Este año el equipo ha mostrado algunas dudas, ¿cree que están cerca de su mejor versión?
Está siendo un año muy largo y todas hemos jugado muchos partidos, es normal que nos tome más tiempo encontrar nuestra mejor versión, incluyéndome a mí. Hay varias jugadoras nuevas en el once y nos tomará algo de tiempo llegar al máximo. Es verdad que antes de Navidad hemos tenido algunos partidos no muy buenos pero estoy segura que después de Navidad llegaremos a nuestra mejor versión.
En Champions les puede tocar el Lyon en cuartos, ¿lo prefiere a un partido o en una eliminatoria?
No me importa mucho, somos el Barça y queremos jugar contra los mejores equipos y ganarles. Creo que cualquier partido vamos con la misma mentalidad sea cual sea el rival así que no importa mucho.
¿Cómo recibe el calor de los aficionados?
Los fans son increíbles, es algo que nunca había vivido antes. Siempre están ahí fuera esperando nuestros autógrafos, son muy cercanos y cuando jugamos en el Johan o en el Camp Nou la atmósfera es increíble. Son la mejor afición del mundo.
Estos días era opcional quedarse en Barcelona o entrenar en su país, ¿por qué decidió quedarse?
Acabo de pasar la Navidad en Málaga porque tengo familia allí y lo pasé muy bien. Sabía que estos días habría un grupo más reducido de jugadoras y podría trabajar más cercano con algunas compañeras y con Jonatan y estoy haciendo un muy buen trabajo sobre el césped y por eso era importante para mí quedarme. Estoy disfrutando mucho y mejorando mucho estos días.
¿Cómo se sintió jugando en el Camp Nou?
El ambiente fue increíble. Fue un día muy especial y un sentimiento muy especial el formar parte de este equipo y enfrentarnos a un gran equipo como el Bayern, fue un gran día y muy feliz de formar parte y jugar para los fans del Barça.
¿Qué hizo con la camiseta?
Tuve que dejarla a lavar y no la tengo pero al final de temporada la recuperaré.
¿Con qué momento de 2022 se queda?
Seguramente ganar la Eurocopa, fue un momento muy especial.
¿Qué le pide a 2023?
Llegar a mi mejor nivel y obviamente ganar la Champions League, la Liga, todo. Para eso vine, para ayudar al equipo a ganarlo todo