El centrocampista Xavi Torres se recuperó de una lesión muscular que arrastraba desde el mes pasado y entró en los planes de su técnico, Joan Carrillo, en el encuentro de este sábado ante el Eibar (0-2) en el Anxo Carro pendiente de cumplir los 22 meses de inhabilitación para jugar en fútbol profesional que le impuso el Tribunal Supremo.
Torres no formó parte del once de Joan Carrillo, pero el técnico pudo contar por primera vez con él desde que se hizo cargo del banquillo.
Empezó como suplente y sustituyó a los 65 minutos a Jordi Calavera. Fueron sus primeros minutos desde que se conoció la sentencia del Supremo.
El jugador rojiblanco fue condenado a 10 meses de cárcel y 22 de inhabilitación para el ejercicio de la actividad de fútbol profesional por el caso Osasuna, primera condena sobre corrupción deportiva dictada en España por amaño de partidos.
Torres fue incorporado por el Lugo en septiembre de 2020 y entonces ya estaba pendiente de los recursos por la sentencia que inicialmente le condenaba a dos años de inhabilitación por amaño de partidos.
El Lugo entiende que la ejecución de la sentencia podría demorarse meses, quizás hasta el final de la temporada, y por eso decidió que se quedara en el equipo en el mercado invernal en lugar de rescindir su contrato ya que le considera un jugador “súper importante, un líder en el vestuario”, según explicó el dirigente del club, Tino Saqués, este mismo mes.