La venta de una participación mayoritaria de los Charlotte Hornets de Michael Jordan a un grupo liderado por Rick Schnall y Gabe Plotkin ha sido finalizada, según se anunció este jueves.
“Estoy encantado de poder ceder las riendas a dos líderes exitosos, innovadores y estratégicos como Gabe y Rick”, explicó Jordan en un comunicado emitido el jueves. “Sé que la organización de los Hornets está en buenas manos en el futuro. Estoy emocionado por el futuro del equipo y seguiré apoyando a la organización y a la comunidad en mi nuevo papel en los próximos años”.
Jordan, cuya etapa como propietario mayoritario termina después de 13 años, seguirá manteniendo una participación minoritaria en el equipo. La compra se realizó a una valoración aproximada de 3.000 millones de dólares; Jordan pagó 275 millones de dólares por una participación mayoritaria en la franquicia en 2010.
El consejo de gobernadores de la NBA aprobó el nuevo grupo de propietarios el mes pasado con un voto de 29-1, según fuentes cercanas a Adrian Wojnarowski de ESPN.
Schnall, quien había sido propietario minoritario de los Atlanta Hawks, y Plotkin, un propietario minoritario de los Hornets, se desempeñarán como copresidentes de HSE (Hornets Sports & Entertainment) y rotarán el gobierno del equipo cada cinco años, comenzando con Schnall.
“Queremos agradecer a Michael por esta oportunidad, así como por su apoyo durante todo este proceso”, comentaron Plotkin y Schnall en un comunicado conjunto. “Durante su propiedad, Michael brindó estabilidad a la franquicia de los Hornets, logró muchos hitos comerciales, reconectó e invirtió en la comunidad de Charlotte y ha posicionado a la organización para lograr un mayor éxito. Esperamos construir sobre este éxito en los próximos años.
Los nuevos propietarios afirmaron que su visión es llevar a los Hornets al “siguiente nivel”, tanto dentro como fuera de la cancha.
El nuevo grupo de propietarios de los Hornets también incluye a Chris Shumway, Dan Sundheim, Ian Loring, Andrew Schwartzberg, Dyal Home Court Partners, los artistas J. Cole y Eric Church, ambos nativos de Carolina del Norte, y varios inversionistas locales de Charlotte, entre ellos Amy Levine Dawson y Damian Mills, entre otros.