La Real llega a la jornada 3 de Liga con cierta sensación de necesidad de ganar. Tras los dos tropiezos consecutivos en casa en los dos primeros partidos, el equipo de Imanol viajó ayer a Las Palmas de Gran Canaria para tratar de celebrar hoy (19.30 horas, horario peninsular, Movistar) un primer triunfo que ya reubicaría a los txuri urdin en una posición más habitual en las últimas campañas y devolvería cierta confianza en este inicio errático. El protagonista absoluto en las horas previas a este encuentro procede de Rusia, tiene 20 años y anuncia tardes de gloria en Anoeta: Arsen Zakharyan fue incluido en la convocatoria de 24 y tiene todas las trazas de disputar hoy sus primeros minutos como txuri urdin. El inicio de una historia que puede ser hermosa.
Imanol respira tranquilo porque con Zakharyan su centro del campo adquiere la frescura y la magia que le faltó por momentos en las dos primeras citas y con Mikel Merino, incluido como el ruso en la lista de 24, puede recobrar el control y el despliegue que tanto se añoraron sobre todo en el segundo tiempo ante el Celta. Con estos dos jugadores, el motor de la Real es mucho más potente.
Queda por comprobar si el técnico alineará a estos dos futbolistas de inicio o prefiere preservarlos para la segunda mitad. Es previsible que ‘Zakha’, como ya le llaman en el vestuario, tenga que esperar su oportunidad en el banquillo, habida cuenta de que llegó a Donostia hace justo una semana. Una incógnita mayor la encarna Merino. Imanol le ha hecho jugar muchas veces de inicio estando al 60 o al 70%.
Tres bajas por lesión
Aritz Elustondo, André Silva y Urko González de Zárate se quedaron en Donostia por lesión y Jon Karrikaburu fue el primer excluido del curso por decisión técnica. Tiene pinta de que no se va a enfundar la camiseta txuri urdin este curso: en los próximos días será cedido, ya no queda ninguna duda. Olasagasti también retornó a la convocatoria, para tranquilidad de su entrenador, que ahora sí tiene recursos de sobra para la medular.
Las Palmas es un rival cuyo rendimiento es difícil de predecir. Suma un punto de seis y da la impresión de que todavía está en construcción. Es un equipo con un estilo muy canario de posesión de la pelota, fútbol a ras de césped y asociaciones constantes.
Un rival con falta de gol
No parece el enemigo más temible, pese a que juega en casa y a que es el conjunto que más posesión ha tenido en estos dos partidos, después del Barça. No gana desde febrero en el Gran Canaria, cancha donde la Real acumula dos victorias seguidas por 0-1, la última en 2018 con un solitario gol de Oyarzabal.
García Pimienta dispone de futbolistas de ataque con cierto pedigrí en Primera como Jonathan Viera, Sandro Ramírez o Munir, aunque al cuadro canario le falta gol. Para tratar de paliar esa laguna han fichado a futbolistas como Máximo Perrone, procedente del Manchester City, y Sory Caba, aunque hasta la tarde noche de ayer no estaba inscrito en la Liga el delantero guineano.
En todo caso, con jugadores como Le Normand, Zubimendi, Kubo, Barrenetxea o Brais en buen estado de forma e inspiración, la Real tiene una ocasión de lujo de estrenar su casillero de victorias ante un recién ascendido, de volver a mostrar sus credenciales de equipo Champions y de presentar en sociedad a su nuevo crack, Zakharyan.