Kuko Ziganda vuelve a escena después de un paréntesis de un año fuera de circulación tras su experiencia en el Athletic. Dispuesto a tomar las riendas de un banquillo si surge la oportunidad. Así lo aseguró el jueves durante el III Bilbao International Football Summit al que acudió como espectador. Unos meses que le han servido para tomar perspectiva. De lo que sucedió en su etapa como míster rojiblanco y del fútbol en general.
“Al acabar la pasada temporada, mi cabeza me estaba pidiendo que era buen momento para coger un poco de espacio, un poco de aire con Bilbao, con el fútbol. Pararte un poco, reflexionar y ver otras cosas”, señaló Ziganda en una entrevista concedida al programa ‘Fuera de Juego’ de Radio Euskadi. Se siente un “afortunado” por haber estado un año en Manchester acumulando nuevas vivencias: “Uno se da cuenta de que esto es muy grande, de que hay muchísimas fórmulas, métodos, ideas, gente bien preparada. Uno tiene que estar abierto a todo y tiene que estar a la última en todo”.
Su etapa en el Athletic no fue gratificante en lo que a resultados se refiere. El navarro firmó dos años, pero solo cumplió uno. Nunca dio con la tecla. ¿Fue Ziganda el pagano de un problema estructural? El preparador ofreció su visión del asunto, que empezó por un elocuente “está mal que lo diga yo”. Muchos son los factores que entran en liza. “Cuando llegas a los sitios también influye el cómo llegas, cuándo llegas, de qué manera… Llegué en el momento que llegué. Con muy pocos cambios, muchos años la misma gente, mucha gente oyendo lo mismo, jugando a lo mismo, la misma idea. Estimular no me resultó fácil”, reconoció Kuko.
Hubo varias piedras en el camino: “Si le añades que fuimos perdiendo efectivos y que eran todo problemas por aquí y por allá, de todo tipo, ya no solo de lesiones, de cambios, de murmullos, de fichajes, de rumores… No se alinearon los astros de la manera ideal para que fluyera”. Eso sí, Ziganda no se quita un ápice de culpa porque él era el máximo responsable. “Pero asumiendo la responsabilidad de que tú eres el entrenador y estás para intentar cambiar esa dinámica y no fui capaz. Igual no era el momento adecuado”, señaló el exentrenador del Athletic.
Fuimos perdiendo efectivos y todo eran problemas por aquí y por allá, ya no solo de lesiones, de cambios, de murmullos, de fichajes, de rumores… No se alinearon los astros de la manera ideal para que fluyera
Ziganda no ha podido seguir al detalle la campaña que acaba de finalizar para los leones, pero destaca que el cuadro bilbaíno “se ha endurecido” de la mano de Garitano. Una fortaleza que ha sido fundamental para escapar de un bache que se prolongó hasta Navidad: “Se ha hecho un equipo más duro, se ha solidificado atrás y ha hecho un bloque para sobrevivir”. Kuko añadió que el Athletic “ha tenido una remontada espectacular”, algo que debe “invitar al optimismo para la temporada que viene”.
Aduriz es uno de los nombres propios en las últimas fechas. El donostiarra seguirá luciendo de rojiblanco un año más. “Es lo suficientemente frío como para decir si tiene ganas de competir o no. Con el tema de la edad, en este caso con mi experiencia personal, puedo decir que uno ya no tiene ganas de competir, le cuesta más pelear, se ve que pierdes facultades… y Aduriz tiene muchas ganas de competir, siempre las ha tenido”, manifestó Ziganda. No tiene ninguna duda de que si ha renovado “es porque tiene muchas ganas de pelear y de hacer gol”. Luchará por ser importante: “Piensa que va a ser protagonista, no se va a quedar aquí para hacer número”.
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