El calor de una afición totalmente volcada con las suyas no fue suficiente para congelar las ideas de la gran favorita para hacerse con el título en el Mundial de Francia 2019. El combinado anfitrión se enfrentaba este viernes al mayor reto de su historia en el intento de eliminar a una Estados Unidos que, pese a eliminar a España en octavos de final, mostró pequeños signos de debilidad en dicho envite. Pero de nuevo, y aunque Francia puso en entredicho la supremacía norteamericana más incluso que la Roja, las de las barras y estrellas resultaron victoriosas gracias a un doblete de Megan Rapinoe. Renard recortó distancias para que Francia soñase con la remontada en el tramo final, pero ésta nunca llegó.
Estados Unidos saltó al verde predispuesta e imponer su ley, y tan solo tardó 5’ en ponerse por delante en el marcador. Lo hizo por mediación de Megan Rapinoe, que tras ser noticia estos últimos días por insistir en su negativa a visitar a Donald Trump en la Casa Blanca, habló también en el terreno de juego. Suyo fue el lanzamiento de libre directo escorado hacia la izquierda que, tras pasar entre un mar de piernas en área pequeña, llegó hasta la red para convertirse en el 0-1.
El gol en contra hizo daño a Francia, que tardó en rehacerse hasta el punto de que durante la primera mitad, a pesar de llevar la iniciativa obligada por el marcador, no acabó de protagonizar ocasiones de gol claras ante una Estados Unidos que daba muestras de estar guardándose una marcha.
Tras la reanudación, tal y como había sucedido en el primer acto, el conjunto norteamericano arrancó con la voluntad de hincarle el diente a su rival. Lo pudo hacer en el primer minuto de la misma, y una doble intervención de Bouhaddi se lo negó, pero lo que la guardameta gala no pudo evitar fue el 0-2 obra de nuevo de Rapinoe en el 65’ al culminar un contragolpe en el que fue asistida por Tobin Heath.
Un tanto de Wendie Renard en el 81’, con un magnífico testarazo tras una falta lateral botada por Thiney animó el tramo final del duelo, pero Estados Unidos tiró de oficio ( y también contó con que no se señalase una mano que bien pudo ser un penalti en contra) para que el pase a las semifinales no se le escapase.
En ‘semis’ espera una Inglaterra lanzada ante la que las norteamericanas disputarán lo que en cierto modo, tal y como se decía en su encuentro frente a Francia, será una final anticipada.
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