1-3: El PSG evita el bochorno gracias a los españoles

Las competiciones en Francia no resaltan casi nunca al PSG, un equipo que tiene mucho más a perder que ganar. El choque ante el Châteauroux fue uno de esos. Tras las dudas sembradas en la derrota ante el Lens, no ayudó la respuesta en Copa pese al triunfo (1-3). El equipo, aunque con muchas novedades en el once, no convenció. Un tanto de Ekitike, otro decisivo de Carlos Soler y un último postrero de Juan Bernat salvaron al cuadro parisino de un susto mayor que hubiera sido inexplicable.

Gharbi fue el futbolista más interesante. El joven, de madre española, puso algo de luz a un PSG apelmazado. Participativo, reclamando protagonismo, recogió un balón en la frontal para entregárselo a Ekitike, que con un toque de exterior confirmó su buena racha: 0-1. El francés, atormentado a principio de temporada, encadena tres partidos consecutivos marcando, importante ya que el calendario aprieta en 2023 y Christophe Galtier necesita un banquillo fuerte.

Esta vez al PSG le superó la pereza. No hubo mejor jugada para darse cuenta que la del empate, desgraciada porque tuvo también su pizca de mala suerte. Un remate sin peligro aparente de Ntolla retrató a Bitshiabu, que en el intento de despejar desvió el balón a su propia puerta, fuera del alcance de Keylor Navas, titular después de mucho tiempo: 1-1. Fueron unos minutos de zozobra para el PSG, amenazado por un descarado Châteauroux.

Al margen de la fiereza de su rival, en la tabla baja de tercera división, a la unidad B de Christophe Galtier se le tiene que pedir mucho más porque hay un abismo entre los titulares y los suplentes. Muchos no aprovecharon su oportunidad. En el segundo tiempo, tampoco bueno, el PSG no solo se enfrentó al Châteauroux, sino también al riesgo de bochorno. Marquinhos socorrió a su equipo, con dudas atrás y falto de colmillo arriba.

Carlos Soler sacó al PSG de un apuro importante. El valenciano, de cabeza, remató un buen centro de Vitinha después de que el arquero del Châteauroux salvara la primera tentativa de Ekitike. En el descuento, Juan Bernat enterró definitivamente el sueño de un rival digno y sofisticado, derrengado por el esfuerzo titánico que hizo. Aunque no fue un buen partido del PSG, los españoles evitaron el desastre para clasificar al equipo para dieciseisavos de final.