74-61: El Zenit noquea al Barça y habrá 5º partido

El sueño de alcanzar al Final Four en el cuarto partido del playoff se esfumó en un abrir y cerrar de ojos para el Barça, que acabó descompuesto en San Petersburgo ante un Zenit impecable. Los rusos se impusieron por 74-61 en el partido más desigual de la serie lo que supone forzar la disputa de un quinto, el próximo martes en el Palau
Blaugrana.

Habrá que ver qué efectos tiene para los azulgrana el varapalo sufrido de cara al desempate ya que, por momentos, la frustración fue máxima. Los de Xavi
Pascual dominaron de principio a fin con ventajas de hasta 22 puntos y una sensación de seguridad inexistente en el rival. Kevin
Pangos acabó con 22 puntos y 8 asistencias dando otro recital de acierto y dirección, con buen apoyo de los interiores Black y Poythress.

El inicio de partido ya fue un infierno para el Barça. Las defensas alternativas del Zenit desconcertaron los ataques del equipo azulgrana, sin ritmo y sin acierto. Los errores cerca del aro se acumulaban mientras el Zenit acertaba con algún triple y continuaciones de sus hombres interiores.

Black cometió la segunda falta al minuto 4 pero su sustituto, Poythress, rompió con su potencia a los pívots del Barça disparando las rentas de los locales (19-9). El tiempo muerto de Jasikevicius no sirvió demasiado para frenar la hemorragia (23-9) con lo que el primer cuarto se cerró con 25-13.

En el segundo cuarto parecía que el Barça podía correr algo más y Mirotic acertó con un triple con lo que las diferencias se recortaron por debajo de los diez (32-24) pero estaba claro que el Zenit no dejaba desplegar al Barça su plan y se mantenía a flote con buena lucha en el rebote ofensivo y batallando por cualquier balón. Al descanso se llegó con 36-26, una cifra de anotación ridícula para los azulgrana que da idea de las dificultades para ver aro.

Lo peor, sin embargo, estaba por llegar. Sólo faltó que Kevin
Pangos entrara en trance con canastas increíbles en racha para ampliar más las rentas de los rusos hasta los 17. El Barça sufrió con la rotación y por momentos sólo Bolmaro fue capaz de jugarse balones. Cuando entró un triple de Abrines, en el minuto 29, no se dio por válido por falta en ataque de Oriola y la desesperación fue máxima tras un dos más uno de Black posterior. El tercer cuarto se cerró con 58-38 después de que el Zenit llegara a dominar por 22.

En ese escenario, los rusos se moverían a placer en el último cuarto: controlando el ritmo y las ventajas, desesperando al rival y anotando canastas increíbles. El amago de remontada del Barça apenas permitió bajar de once la diferencia en un final irreversible y para olvidar.