No hay margen de error. Cara o cruz. Vida o muerte. Una final. Pongan el tópico que deseen. Pero el Atlético de Madrid se lo juega todo esta noche ante el Lokomotiv en el Metropolitano. A partir de las 21 horas, y con arbitraje del húngaro Viktor Kassai, el conjunto rojiblanco peleará por pasar a octavos de la Liga de Campeones. Lo bueno para los de Diego Simeone es que dependen de sí mismos, que juegan en casa y ante un rival eliminado, que no tiene opciones ni de Europa League. Lo malo, la racha de los rojiblancos, que acumulan un mes sin ganar, que no han marcado en los tres últimos partidos y que, mirando al pasado, se le aparecen los fantasmas del Qarabag o del Brujas.
La lógica invita a pensar que el Atlético superará al Lokomotiv y estará en octavos. Con siete puntos, uno más que el Leverkusen, que recibe a una Juventus que ya es primera de grupo, todo lo que sea ganar dejará en octavos a los colchoneros. Otro resultado obligaría a mirar a Alemania y confiar en un ‘cable’ de los italianos, que previsiblemente reservarán gente por su desahogada y merecida posición. Es decir, que el Atlético tiene que hacer sus deberes o, en su defecto, igualar el resultado del Bayer en Turín.
Lo primero que deberá hacer el conjunto madrileño es superar ese problema que, además de puntería, es ya psicológico. La ansiedad de cara a puerta mostrada en las últimas citas, en las que los colchoneros han acumulado más de 40 intentos sin un solo acierto, ha lastrado al equipo. Reconciliarse con el gol resultará fundamental para llegar a buen puerto.
En este sentido, muchos de los focos apuntan a Joao Félix. El jugador ‘diferente’ que tiene el Atlético lo intentó hasta la saciedad en La Cerámica. Pero no estuvo acertado. El portugués, a pesar de sus 20 años, está llamado a dar un paso al frente en noches como la de hoy. Secundado, eso sí, por hombres como Morata (se acabó su racha y no ha vuelto a celebrar un tanto), Correa, Saúl o Koke.
El Cholo introducirá cambios en el equipo. Trippier, Giménez, que vuelve tras su lesión casi un mes y medio después, y el mencionado Correa, regresan al once, del que se caen Arias, Hermoso y Herrera. La consigna que ha dado Simeone a sus jugadores en estos días es clara: paciencia y tranquilidad. La mejoría ha sido evidente, pero falta corroborarla con goles. Y qué mejor día para recuperar la confianza que ante el Lokomotiv. Porque el rival ya está eliminado, y porque el Atlético se la juega.
Yuri Semin, técnico ruso, dejó en casa a los lesionados Guilherme o Joao Mario, pero ya cuenta con los dos hermanos Miranchuk, lo más peligroso del cuadro moscovita. Será el último partido del año del Lokomotiv, una vez parada la liga local, y querrán despedirse de la Champions dejando un buen sabor de boca en un escenario de lujo. Comandados por el ex sevillista Krychowiak, jefe en el centro del campo, y por el descaro de los gemelos, el cuadro ruso ya ha demostrado ser capaz de sorprender.
Pero el Atlético no puede fallar. No quedarse fuera de los octavos de final de la Liga de Campeones. Sería un golpe duro, muy duro, y quién sabe si definitivo, a este curso ‘de transición’. Los colchoneros deben volver a creer, empezando por esta noche. El Atleti, como ‘Loko’ a por los octavos.
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