Elizegi destaca que están “orgullosos” del primer año, pero “sin ser triunfalistas”


Aitor Elizegi cumple hoy 365 días en la presidencia del Athletic. Un momento para detenerse y echar la vista atrás. Repaso de la actividad en el cargo. El pasado 27 de diciembre de 2018 fue una jornada de “pies fríos y muchas horas en el asfalto de Ibaigane. Pero todo un privilegio por compartirlo con personas que también quieren que el Athletic siga siendo verdad. Un club que en el siglo XXI sigue soñando con competir con los suyos”.



El presidente rojiblanco destaca que “estamos orgullosos, ha sido un año largo pero muy bonito”. Y añade que “no nos conformamos, defendemos a diario el esfuerzo, la constancia y el compromiso. Y lo hemos transmitido en todas las áreas del club”. Vive todo con “responsabilidad e intensidad, si marca el juvenil soy feliz, pero si pierde el cadete estoy triste”

Elizegi pone sobre la mesa que “a nivel interno, en nuestro ADN somos duros en el trabajo. Somos un equipo autoexigente que no se regala el halago. Esa distancia entre lo que quieres y lo que consigues hay que saber gestionarla y medir tiempos, no siempre lleva la velocidad que tú quieres”. En otro momento lanza que “no quisiera ser triunfalista, también sabemos ser duros con nosotros. A veces no hemos explicado bien el proyecto. No supimos llevar la asamblea con la mano derecha, izquierda y la brillantez necesaria. Era la primera para nosotros, pero no es óbice para reconoce que se podía haber llevado mejor”.

El cocinero bilbaíno apunta en relación al área social que “hemos puesto el foco sobre el socio, abriendo espacios para trabajar con ellos. La apertura de Ibaigane es constante, diaria y múltiple. Está abierto de par en par. También se ha puesto el foco en la reforma de la grada de animación. Es justo reunificarla para que empujen desde el mismo espacio como en otros estadios europeos”. También celebra haber instalado canales de comunicación diarios con los seguidores del Athletic que están fuera de Euskal Herria, creando “nuestra portada” para dirigirse a todos los que llevan al club “en corazón”.

El inquilino del sillón de Ibaigane pone en valor su actuación en varios foros futbolísticos. “Tanto en la UEFA, como en la Liga y en la Federación, no hemos dejado de levantar la voz del Athletic, con sus palabras, sus mensajes y esa forma de hacer diferente. No vamos a renunciar a estar en esas mesas, el Athletic necesita estar representado con su palabra bien alta y clara. Ese aspecto lo hemos recuperado y queremos seguir incidiendo”, manifiesta.

Elizegi señala que “hemos cumplido con la palabra presupuestaria. Heredamos el compromiso de un presupuesto que cumplimos a rajatabla. Era nuestra obligación llevarlo adelante”. Además, habla de un “presupuesto continuista” para seguir invirtiendo en “una plantilla deportiva competitiva, un Lezama de futuro y seguir fustigándonos con ingresos ordinarios y extraordinarios para estar más cerca de las grandes marcas de Europa”.

El presidente del Athletic piensa que en Lezama “está siendo capaz de competir cada plantilla. Y hemos reforzado la estructura femenina, estamos sembrando para recoger en el futuro. Por ejemplos, los dos proyectos que están cerca de los primeros equipos, los de Iraia y Etxeberria, están funcionando y están formando. Vemos jugadores con futuro para las primeras plantillas. Y hay capacidad de coordinación entre todos”. La residencia para jugadores también era una prioridad.

Por otro lado, subraya que “la Fundación debe ser nuestra guía” y ha elogiado sus “resultados, proyectos, profesionalidad y compromiso” buscando devolver a la sociedad lo que les da. “Para eso es una herramienta perfecta”. Y no quiere dejar pasar la oportunidad de “dar las gracias a Villacampa y Garitano por dirigir con mano firme este timón, por no dudar y creer en el club y en nosotros. Han colocado a sus equipos donde merecen, compitiendo y haciendo de San Mamés y Lezama campos únicos. Fuera también están siendo un rival complejo. Hay que desearles un 2020 muy parecido. Han recuperado al Athletic, la fuerza, el nombre…”.


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