Pep Clarós, el técnico de Tiana (Barcelona) que prosigue después de varias temporadas su aventura en el basket japonés, cree que los Juegos de Tokio serán un éxito a pesar del aplazamiento que han sufrido y las dificultades que están afrontando por la pandemia del coronavirus.
“A esta gente que se ha gastado mucho dinero y ha invertido mucho le sabe muy mal pero estoy seguro que harán unos Juegos Olímpicos espléndidos y será un éxito pero primero hay que controlar y parar la situación de la epidemia”, asegura Clarós
el mismo día en que se ha confirmado la cancelación de la temporada en el basket japonés. Para él, que ha estado dirigiendo a los Fukuoka Rizing (donde estaba jugando el cántabro David Doblas) eso supone acabar el curso y pensar en un retorno a Catalunya que confía en completar la próxima semana.
“El gobierno estaba esperando que fuera el COI el que se pronunciara pero aquí la gente ya veía que celebrar los Juegos este verano era imposible porque no había preparación ni ningún quorum internacional para pensar en ello”, señala Clarós sobre las expectativas depositadas en los Juegos. “Lo que ocurre es que ha habido una inversión de 5.000 millones y hay 11.000 viviendas de lujo donde tendrían que estar alojados los atletas que están vendidas y preparadas para entrar a vivir tras los Juegos”, agrega.
Japón trató de retomar el pulso de la liga tras un parón por la epidemia pero no ha podido hacerlo con normalidad ya que han surgido nuevos casos de infectados por coronavirus y una peligrosa segunda oleada. “Para el 70 o 80% de equipos se ha acabado todo. Para el resto no se sabe porque ahora están hablando de cerrar Tokio porque se están destapando casos que ya se preveía porque el caso de los Juegos estaba tapando cosas. Ahora es posible que los números se disparen aquí también. Piensa que en Tokio entran cada día para trabajar tres millones de personas procedentes de Saitama, Yokohama… “, señala.
Tras salvar la categoría, el equipo de Fukuoka pone fin a la aventura de este año sin que se haya planteado recortes en salarios o contratos, según señala Clarós, que tiene contrato por un año más y dice sentirse “contento y apoyado” en la entidad. “Por ahora ni nos han dicho nada ni creo que nos digan. De hecho, se han comprometido a respetar los contratos. El propietario es un empresario que está haciendo una zona residencial y un hotel con zona comercial delante del pabellón. Además, tiene un negocio online y en estos momentos todavía le va mejor. En nuestro caso no. Seguramente habrá recortes en algunos equipos pero no creo que sean importantes en equipos de ciudades grandes. No creo que en basket afecte a mucha gente”, concluye.
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