Kiko Matamoros ha dado por terminado su verano, un verano que de nuevo, tal y como sucediera en 2019, le ha traído un paso por el hospital. Atrás quedan ya las vacaciones en México junto a Marta López y algo más lejos su extirpación de vesícula. Fueron tres semanas en las que Kiko sufrió mucho y terminó completamente exhausto. Sin embargo, no ha sido hasta ahora cuando se ha decidido a enseñar a todos las secuelas de su hospitalización.
El polémico colaborador ha ‘posteado’ en su cuenta de Instagram una foto de su torso desnudo para desvelar su nueva figura. En ella se ve un Kiko Matamoros mucho más delgado, menos musculado y unos apósitos en su costado que tapan todavía la herida de la intervención quirúrgica a la que fue sometido. En total ha perdido 14 kilos, una cifra demasiado alta y que tendrá que equilibrar poco a poco para recuperar su mejor estado de salud.
Bajo el título «Mi nueva realidad», Kiko se ha fotografiado así. Quien no ha perdido la oportunidad de arroparle públicamente ha sido su chica. Marta López ha comentado la publicación: «A mí me gustas tengas la realidad que tengas ❤️ pero muy pronto estarás a tope de nuevo 😍». Más apoyo ha tenido por parte del Maestro Joao: «[email protected] sueñan con tu realidad @kiko_matamoros ole y ole!!!» o de Darek: «Estás para competir amigo ! 😉 ahora toca la talla fitness!», escribían.
Por delante le queda todavía camino de recuperación así como revisiones médicas para asegurar que todo esta perfectamente. Aún no se ha producido su regreso a ‘Sálvame’ ni a ninguno de los programas de Mediaset con los que colabora. Las últimas noticias de Kiko Matamoros las tuvimos hace una semana, cuando aterrizó en Barajas y contestó a todos los frentes que tenía abiertos: su guerra con Makoke, la mala relación con su hija Anita, la nueva aparición de Cristina Pujol o el supuesto escarceo sentimental entre su novia y Kiko Jiménez en el pasado.
Si bien es cierto que Kiko está deseando recuperar la normalidad, volver a trabajar y encontrarse recuperado, hay algo que le trae por la calle de la amargura. El mayor dolor de cabeza que tiene el colaborador es la guerra entre su hija, Anita Matamoros, y su pareja, Marta López. Eso es lo que más le ha dolido de todo lo que ha pasado desde que dejase ‘Sálvame’ por motivos de salud y posteriormente se marchara de vacaciones.