Rafael Osorio llama a la ciudadanía a tener mayor conciencia sobre la enfermedad y aplicar las medidas de seguridad sanitaria para evitar contagios.
Por Héctor Raúl González
Luego de operar a un paciente con Covid-19, el doctor Rafael Osorio Rojas, médico cirujano adscrito al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), contrajo la enfermedad que casi le provoca la muerte.
“Atendimos a un paciente que tuvimos que operar y se le hicieron las pruebas respectivas y salió positivo a Covid, ahí fue el momento, la exposición que tuvimos, como todo servidor público de la salud, a pesar de que algunos cuentan con recursos para protección de la salud de los médicos, es tanta la exposición que llegan a contagiarse”, dijo.
Tras presentar algunos síntomas, el médico se sometió a algunos exámenes que arrojaron que estaba contagiado del nuevo coronavirus.
“En la primera semana yo tuve diarrea un día, el segundo y tercer día mucho dolor, lo que la gente le dice dolor de cuerpo, que es un dolor muscular intenso y al tercer día tos.
“Otros pueden tener fiebre, yo no la tuve, pueden tener problemas de respiración, yo hasta el momento que me tomé la placa de Rayos X empecé a tener el problema de la respiración. No todos los casos son iguales, algunos pacientes presentan ciertos síntomas, otros no; algunos se pueden confundir con un dengue o influenza”.
En cuanto revisaron la placa uno de sus colegas pidió que le realizaran una tomografía. Los resultados confirmaron las sospechas: el doctor Osorio tenía Covid-19 y debía ser hospitalizado.
Alejandra Ponce Ponce, médico internista y médico intensivista del IMSS, recordó cómo inició el tratamiento de su colega.
“Varios de los médicos que han estado al frente han salido infectados, lamentablemente uno de ellos cursó gravemente, tuvo una evolución muy tórpida. Llegó con nosotros a tiempo durante los primeros días, con una gran afección a nivel pulmonar, se le hizo una tomografía de tórax con una afección moderada, de manera inicial empezamos con medicamentos para inmunomodular su respuesta de inflamación que estaba bastante severa.
“Lamentablemente no respondió a dos de los tratamientos y prácticamente en 48 horas, casi al término de los días de riesgo, que son del 10 al 14, por el día 14 y 15 él hizo falla respiratoria aguda, requiriendo ventilación mecánica, de ahí lamentablemente la ventilación fue difícil en él porque el pulmón se puso demasiado rígido y pues requirió prácticamente más de un mes de ventilación mecánica”, expresó.
El tercer tratamiento que recibió el doctor Osorio Rojas fue la transfusión de plasma.
“El hecho de no haber respondido al trata miento inicial, que son medicamentos de uso hospitalario y realmente muy caros, afortunadamente los tenemos en el IMSS y es un privilegio para muchos de nuestros pacientes porque incluso en muchos de los hospitales, aun siendo de paga, no se cuenta con esos medicamentos.
“Aquí pues tuvo el privilegio y la fortuna de que estuvieran a su disposición, lamentablemente no hubo una respuesta adecuada, se decidió darle un manejo alternativo, que es la terapia con plasma, se le dieron dos sesiones, a partir de ahí empezó a responder un poco mejor, aunque cursó con dos semanas de suma gravedad, incluso pensamos que iba a fallecer”, contó la doctora.
El daño fue tal, que el paciente fue sometido a una traqueostomía.
“El pulmón se quedó un poquito fibrótico, pero evolucionó bien dentro de lo que cabe, prácticamente más de 45 días de estancia en la Unidad de Cuidados Intensivos, se tuvo que realizar una traqueostomía para mantener una adecuada vía aérea y dentro de lo que cabe la evolución fue lenta, pero afortunadamente hacia la mejoría
“Egresó a piso de Medicina Interna, nuestros compañeros ahí hicieron una gran labor, se le dio una buena rehabilitación física y se manejó con técnicas de aislamiento todavía y eso favoreció para que el doctor no se sobreinfectara,”, dijo.
Tras dos meses de hospitalización, Osorio fue dado de alta.
Para él, dijo, fue como volver a nacer.
“En un momento yo no hablaba, ahorita estoy recuperando la voz. Daban un 5 por ciento de sobrevida, por eso es la magnitud de que la gente debe de cuidarse y sobre todo evitar contagiar a los demás.
“Después de dos meses de estar hospitalizado es una emoción grande, puede decirse que volví a nacer porque en todo momento estuve sedado, dormido, tuvieron que manejar un medicamento o un analgésico muy potente para manejar el dolor que yo tenía. Agradezco a la vida el haber salido adelante porque hay compañeros del sector salud, médicos, enfermeras, trabajadores sociales, asistentes, que han muerto, de edades mayores, y jóvenes. A pesar de esto hay gente de la población que ha fallecido y sigue sin creer en la enfermedad”, dijo.
Desde su casa, donde Rafael Osorio se recupera, llamó a la ciudadanía a tener mayor conciencia sobre la enfermedad y aplicar las medidas básicas de seguridad sanitaria para evitar la propagación del virus.