La piel de la cara está continuamente expuesta a todo tipo de agentes externos: rayos solares, contaminación… Con la limpieza diaria únicamente retiramos la suciedad más superficial, pero siguen quedando impurezas que poco a poco van obstruyendo los poros. Por esta razón el carbón activo se ha convertido en el producto de moda en el mundo de la cosmética. Los beneficios del carbón activo en el rostro son muy amplios, pero hay uno que destaca especialmente: tiene una gran capacidad para limpiar la piel en profundidad y reducir la grasa.
Es excelente para personas con la piel grasa ya que absorbe el exceso de sebo y elimina los puntos negros. ¿El resultado? Una piel tersa y firme, que ha recuperado su luminosidad natural.
¿Qué es el carbón activo?
Algunos tipos de carbón se obtienen mediante la combustión de cáscaras de coco o de madera, mientras que otros provienen del petróleo. Para que este ingrediente pueda ser utilizado en el mundo de la cosmética, debe ser activado previamente. Para ello se somete a un proceso de oxidación que potencia su absorción e incrementa su porosidad. Así es como se consigue un elemento orgánico con propiedades desintoxicantes.
¿Cuáles son los beneficios del carbón activo?
Uno de los principales beneficios del carbón activo en el rostro es que elimina los puntos negros al tiempo que reduce el tamaño de los poros. Estos son dos de los grandes problemas de las personas con la piel grasa. Elimina eficazmente todas las impurezas acumuladas, desobstruyendo los poros y permitiendo a la piel que respire mejor.
Además, favorece la expulsión de toxinas y desintoxica la piel, dejándola suave y limpia. No hay que olvidar que absorbe el exceso de sebo, así que la cara queda libre de granitos, puntos negros, impurezas y brillos.
Y, por último, el carbón activo es una fuente rica en propiedades desinfectantes y anti-bacterianas, de forma que elimina las bacterias que se acumulan sobre la superficie de la piel y que favorecen la aparición de espinillas y granitos.
¿Cómo utilizar el carbón activo?
El carbón activo se utiliza generalmente como ingrediente en mascarillas purificantes y detox. Claro que también es el ingrediente principal de otros productos cosméticos como cremas faciales, lociones y exfoliantes.
Lo más importante es elegir siempre un producto de la mejor calidad. Hay algunas mascarillas de carbón activo que son muy perjudiciales. Son mascarillas peel-off, que se adhieren al rostro como si de pegamento se tratara, de forma que al retirarlas se arranca la primera capa de la piel.
Aunque los beneficios del carbón activo en el rostro son muy amplios, es recomendable evitar comprar productos low cost a marcas desconocidas y preparar este tipo de mascarillas en casa.
Por último, cabe señalar que la mascarilla de carbón activo se recomienda sólo a personas con la piel grasa. En pieles sensibles puede resultar demasiado agresiva, e incluso provocar la aparición de ampollas.