Fernando Alonso es sin duda el gran protagonista de la jornada previa al GP de la Emilia Romaña de Fórmula 1 en Imola. El piloto asturiano era el más buscado en un viernes atípico en el que los coches no rodaron debido al nuevo formato que experimenta la F1 en este trazado mítico, de solo dos días de actividad en pista con una única sesión de libres el sábado antes de la clasificación. El ovetense se presentó en el circuito transalpino para seguir con su preparación para su esperado regreso al ‘Gran Circo’ en 2021 al volante de un Alpine Renault.
Tras disputar la Indy500 se centró completamente en este nuevo desafío, adaptando su entrenamiento físico a las exigencias de la F1, siguiendo las carreras a través de un garaje remoto en su casa con acceso a la radio del equipo Renault, a sus reuniones y las cámaras ‘on board’ de Ricciardo y Ocon. En estos meses también ha realizado reuniones virtuales con los ingenieros y presenciales en la fábrica, donde ya ha acumulado horas de simulador. Además, hace unas semanas probó el Renault de 2020 en un ‘filming day’ en Barcelona para volver a recuperar sus sensaciones al volante de los coches más rápidos del mundo. Ahora, le toca empaparse de todo lo que hace Renault en el circuito para entender todos los procedimientos del conjunto de cara al año que viene. Todo ello, antes de que la semana que viene, los días 4 y 5 de noviembre, vuelva a subirse a un F1 de 2018 en Bahrein junto a Renault para seguir recuperando su velocidad para preparar su ansiada vuelta al asfalto del ‘Gran Circo’.
“Estoy contento de volver, de ver a tantas caras conocidas en el paddock y también de ver un poco el equipo como trabaja desde dentro, ya estando aquí. Los he seguido desde casa pero no es lo mismo. Así que, hemos hecho una lista importante de cosas para hacer”, apuntó el piloto ovetense en declaraciones a ‘Movistar F1’ en Imola.
“Por desgracia, en este deporte no se puede entrenar, solamente con simuladores. Con ganas de que empiece el año que viene. Hay una nueva reglamentación para quitarle un poco de ‘downforce’ a los coches, con algunos cambios en el suelo, en las entradas de los frenos de atrás, de refrigeración… y bueno, a ver si nos podemos adaptar bien a esos cambios y podemos mantener este nivel el año que viene y estar en el Top-5 o Top-7 de manera regular sería fantástico”, añadió.
“Imola es un gran circuito. Tengo buenos recuerdos, pero también tristes por Ayrton Senna”, expresó ante las televisiones en un trazado en el que logró una de sus victorias más recordadas, la de 2005, aguantando durante más de 10 giros la presión asfixiante de Michael Schumacher.
“Es interesante ver cómo trabaja el equipo desde dentro. Estoy intentando ‘empaparme’ de todo lo que pasa. El equipo está en una línea ascendiente y al volver a la F1 me siento como en casa”, agregó el bicampeón del mundo de F1, consciente de lo mucho que deberá aprovechar el próximo test en Bahrein debido a que en 2021 se prevé que la F1 solo realiza 3 días de test (uno y medio para cada piloto).
“Habrá solo un día y medio de pretemporada por piloto,. así es difícil preparar un Mundial. Es un nuevo equipo, con nuevos procedimientos y formas de trabajar, todo es nuevo”, comentó, rechazando además la opción de competir en un GP este curso: “Si compito en 2020 es porque algo le ha pasado a alguno de los dos pilotos actuales, y espero que eso no suceda”.
Source link