Kimmie Greene es una de las analistas financieras más conocidas y prestigiosas de todo el mundo. Ella elaborado la conocida como ‘Fórmula Greene’, un modelo que determina cuánto dinero debe tener ahorrado una persona según su edad. Todo se basa en porcentajes según el salario bruto anual, no en cantidades fijas de dinero.
Si una persona tiene 22 años, según este modelo, debería tener ahorrado el 25% de su salario anual. Es precisamente a los 20 años cuando comienza aproximadamente la vida laboral de una persona y por lo general los sueldos no son demasiado altos. Pongamos que, por ejemplo, un joven de 22 años gana al año 15.400 euros (1.100 euros mensuales en 14 pagas anuales). Teniendo en cuenta la ‘Fórmula Greene’ debería tener ahorrados 3.850 euros.
Una vez cumplidos los 30 años, la persona tendría que tener ahorrado el 100% de su salario anual. El sueldo promedio en España en 2020 fue de 26.934 euros, de forma que esta sería la cantidad de dinero que debería tener en forma de ahorros.
A partir de este punto, según la ‘Fórmula Greene’ dice lo siguiente: a los 35 años debe tener el doble de dinero ahorrado de su sueldo bruto anual, a los 40 el triple, a los 45 el cuádruple, a los 50 el quíntuple, a los 55 el séxtuple, a los 60 el séptuple y a los 65, cuando está a punto de llegar la edad de jubilación, ocho veces el salario anual.
Siguiendo el ejemplo de una persona que gana 26.934 euros al año, a los 65 debería tener ahorrados 215.472 euros. Esto implica que en la práctica tendríamos que ahorrar el 20% del salario anual cada año.
Ahora bien, la propia Kimmie Greene reconoce que estos plazos no tienen por qué cumplirse de forma 100% estricta ya que la vida no es «lineal». En un momento dado pueden mejorar de forma sustancial las condiciones económicas y compensar en cuestión de poco tiempo varios años en los que el nivel de ahorro ha estado por debajo de lo establecido
En una entrevista a la CNBC, la analista financiera explicaba que si una persona se plantea jubilarse anticipadamente debe, en base a este sistema de ahorro, hacer algunos sacrificios: dar prioridad al ahorro frente al ocio, vivir en una ciudad donde el coste de vida sea bajo e incluso dejar de lado por un momento la idea de formar una familia.
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