La continuidad en el Rayo Vallecano del internacional peruano Luis Advíncula, que está cedido por el Tigres mexicano, queda en el aire con el descenso a Segunda del equipo madrileño, que tendrá que reducir presupuesto económico y montar una plantilla acorde a la categoría.
Hace menos de un mes, el 12 de abril, Advíncula dejó abierta la puerta a seguir en el Rayo la próxima temporada en una entrevista con EFE.
“Estoy muy bien en el Rayo y me gustaría quedarme. Aún falta mucho, pero pase lo que pase, y ojalá sea lo que Dios quiera, me gustaría quedarme”, comentó el peruano, cuando aún su equipo tenía opciones de salvarse.
Las últimas semanas no han sido fáciles para Advíncula, que desde la llegada de Paco Jémez ha perdido su papel protagonista como titular.
Hasta la jornada 28 había disputado 25 partidos de Liga con Míchel, pero con Paco Jémez, en los últimos ocho, solo ha jugado dos y en uno de ellos acabó expulsado. Además, un partido sin jugar por sanción, tres en el banquillo sin entrar al césped y dos sin convocar.
Jémez ha apostado por Tito para el lateral derecho y Advíncula ha quedado relegado a un segundo plano. Con la continuidad asegurada en el banquillo de Paco Jémez, el futbolista peruano podría no entrar en los planes para la próxima temporada.
Además, Advíncula, internacional con Perú en 77 ocasiones y experiencias al más alto nivel en Portugal, Alemania, Argentina o Turquía, goza de un buen cartel entre algunos clubes europeos que lo han seguido esta campaña desde las gradas del estadio de Vallecas.
Cuando termine la Liga española, Advíncula se incorporará al trabajo con su selección para preparar la Copa América de Brasil, para la que han quedado emparejados en la fase de grupos con Venezuela, Bolivia y el país anfitrión. Durante ese tiempo, tendrá que decidir su futuro o esperar a terminar el campeonato continental para tomar una decisión.
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