La selección española sub-17 empató frente a Serbia (1-1) tras recibir el tanto de Jovan Milošević de penalti en el minuto 88 que, aunque anotó para los suyos un gol que les metió en cuartos de final, no varió la primera posición del equipo dirigido por Julen Guerrero, que espera rival entre Dinamarca y Suecia.
Ambas selecciones salieron al terreno de juego con la lección aprendida de sobra. Un empate certificaba el primer puesto del Grupo C de España y a la vez la clasificación de Serbia como segunda para cuartos de final. Y se notó sobre el verde al inicio.
Además, Julen Guerrero aprovechó que ya tenían el pase en el bolsillo para apostar por caras nuevas que no habían tenido tanta participación contra Turquía y Bélgica. La primera bajo palos con la titularidad de un Ferrán Quetglás, que acaba contrato con el Mallorca el 30 de junio y el Real Madrid le sigue muy de cerca para hacerse con sus servicios.
El guardameta hizo gala de dos de sus grandes virtudes. La primera el ser un portero ágil y atento al juego para salir con contundencia al corte y la segunda su colocación y reflejos en el mano a mano. Tras tres meritorias salidas en la primera mitad, arrancó los segundos 45 minutos achicando rápido e imponiéndose en el duelo con el delantero serbio Jovan Milošević, que demostró no tener nada de tosco a pesar de sus 1.9 metros de altura.
Y es que fue en el m.46 cuando llegó la primera gran oportunidad del encuentro. En los minutos previos España intentó generar peligro con centros laterales, siguiendo el plan previsto por Julen Guerrero con el once titular, pero Álvaro Ginés, delantero del Real Madrid, no estuvo acertado en sus dos remates en apenas un minuto (m.42 y m.43), el primero de chilena.
Los diez minutos iniciales de la segunda mitad mostraron una actitud diferente de Serbia, a quien la victoria le servía para arrebatar el primer puesto a España, y el técnico de esta movió el banquillo en un triple cambio en el que, además de dar descanso a Javier Boñar, quien había jugado todos los minutos, metió a dos nuevos futbolistas en el centro del campo.
Tanto Gerard Hernández, titular contra Turquia y Bélgica, como Antonio Moreno volvieron a darle el dominio el encuentro a una España que vivía tranquila con el resultado mientras que Serbia bajó el ritmo tras ver cómo Bélgica cumplía su parte ganando a Turquía desde el m.63, por lo que no se podían permitir la derrota.
Todo seguía un guion amable para ambas selecciones, hasta que todo explotó momentáneamente por los aires. David Mella firmó un gol de bella factura, dejando atrás a dos defensas serbios y pegándole con la pierna derecha, la menos hábil, en un disparo cruzado que supuso el 1-0 para España en el m.76.
Tan solo tres minutos después, Serbia vio como se quedaba con uno menos por la expulsión de Jovan Mijatovic con dos amarillas en cuatro minutos. Sus únicas opciones para clasificarse pasaban por empatar un partido jugando a la desesperada o confiar en que los turcos, ya sin opciones, le plantaran cara a Bélgica.
Ocurrió lo primero, contra pronóstico y con un penalti en el m.88 de Antonio Moreno sobre el central Majstorovic, que no fue ya que el futbolista español pisó balón y el serbio se tropezó al quedar la pelota parada. Milosevic, quien marcó para empatar en el mismo minuto frente a Bélgica y también desde los once metros, engañó a Quetglás e hizo un 1-1 que vale oro para los suyos.
Primer gol encajado para España sub-17 en el torneo que, sin embargo, no influyó en su clasificación y permite a los de Julen Guerrero pasar como primeros del Grupo C y esperar rival en cuartos que saldrá del segundo clasificado del Grupo B, puesto que se juegan Dinamarca y Suecia.