La catedral St. Stephen de Viena acogerá el funeral de Niki Lauda el próximo miércoles, 29 de mayo. Se tratará de una ceremonia pública, a la que los aficionados del tricampeón mundial podrán asistir para despedirse del austriaco por deseo expreso de su familia.
El gran deseo de la mujer de Niki, Birgit, es que el funeral fuera público, según revela el párroco Toni Faber. “Creo que es necesario que muchas personas se despidan de Niki Lauda en persona y que se haga expresamente en este edificio, uno de los que solía visitar el austriaco con frecuencia. Aunque no asistía a los servicios religiosos, acudía a veces con sus hijos a encender velas”, ha señalado Faber.
”El féretro llegará el miércoles. Lo acompañaremos solemnemente hacia la catedral y durante cuatro horas el público tendrá la oportunidad de despedirse de nuestro Niki”, ha añadido el religioso.
La familia de Lauda, que ha rechazado enterrar a Lauda en una tumba de honor (ofrecimiento hecho por la ciudad de Viena), asistirá a un funeral privado independiente y al posterior entierro, según informa el diario austriaco ‘Heute’. Niki será enterrado en el cementerio de Neustift, en el mismo lugar en el que sepultaron a su madre, Elisabeth.
Se espera que al funeral acudan alrededor de 300 amigos de Niki, entre ellos numerosas celebridades del mundo del deporte y del cine.
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