"Está quebrada la alianza atlántica": Jorge Álvarez Fuentes

El embajador Jorge Álvarez Fuentes, miembro del Consejo Mexicano de Asuntos Internacionales y profesor de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP), hizo un análisis este martes en Aristegui en Vivo sobre el alcance que tiene el anuncio de Estados Unidos de suspender temporalmente la ayuda militar a Ucrania.

El diplomático de carrera desde 1987 y ex embajador mexicano en Egipto, Líbano, Emiratos Árabes Unidos y Nueva Zelanda, manifestó que la reunión entre Volodímir Zelenski y Donald Trump, acompañado por el vicepresidente James David Vance, en la Casa Blanca, fue un encerrona en la que se buscó extorsionar al líder ucraniano.

Álvarez Fuentes también se refirió al acercamiento entre Estados Unidos y Rusia en el contexto de la guerra en Ucrania y el conflicto comercial con China.

Sobre el anuncio de Estados Unidos de suspender temporalmente la ayuda militar a Ucrania, Álvarez Fuentes señaló:

“Efectivamente hemos visto en los últimos días una vorágine. Apenas ayer lunes el presidente Trump ordenó la suspensión temporal de la ayuda militar a Ucrania. Claro, esto se viene a sumar a lo ocurrido en ese desastroso, bochornoso encontronazo en la Oficina Oval, en la Casa Blanca, entre el presidente Zelensky, el presidente Trump y el vicepresidente Vance.

“Es una medida de presión, una medida coercitiva, según las declaraciones de la administración Trump, para tratar de acercar a Zelenski y a Ucrania a la mesa de las negociaciones, pero si vemos lo ocurrido entre el viernes y hoy martes, podemos tener algunos elementos de análisis.

“Después de que Zelenski salió de la Casa Blanca, realmente en una situación inédita,  fue recibido en Londres por los líderes europeos, por el canciller de Turquía, el primer ministro de Canadá, que le reiteraron su respaldo, en una medida que es importante subrayar, porque pone de manifiesto la fractura que hay entre Estados Unidos y las democracias occidentales europeas.

Está aquí prácticamente quebrada la Alianza Atlántica, una de las premisas de la seguridad internacional en las últimas décadas.

“¿Qué significa la medida de suspensión de la ayuda? Que todos los equipos, municiones y todos los pertrechos estadounidenses que estén en vías de llegar a Ucrania, quedarán suspendidas, muchas de ellas se van a detener en Polonia, que es la puerta, sobre todo, para el suministro de armas, y quiere decir que Ucrania sólo contará con los equipos, suministros, municiones que tiene en su territorio.

“La medida ya ha sido celebrada por Rusia, por supuesto, pero también hemos visto la decisión de la presidenta de la Comisión Europea (Ursula von der Leyen) anunciando que Europa tiene que rearmarse, y se habla de 800 mil millones de euros. Es una medida sin precedente.

“Estamos realmente en un momento en donde hay que entender el trasfondo. Yo pienso que para Trump, habiéndole dado la espalda a los europeos, a Trump lo que le importa más que nada es distanciarse del conflicto.

Lo que vimos en la Casa Blanca el viernes era, por un lado, Trump esperaba que Zelenski se allanara, que aceptara dócilmente un acuerdo sobre los recursos minerales de su país. Prácticamente estaba siendo extorsionado, porque no había ninguna garantía de seguridad.

“Ese acuerdo contemplaba, o contempla, veremos qué dice hoy en la noche sobre el particular, que Ucrania cedería a perpetuidad el 50% de sus recursos minerales, sobre todo en minerales estratégicos.

“Pero no era solo eso, era sobre todo, lograr lo que en términos más prácticos deberíamos de hablar más que de una negociación de paz, hablar de una rendición, de lograr que Zelenski y el gobierno de Ucrania recapitulen.

“¿Por qué? Porque hemos visto también en las últimas horas una intensa actividad de comunicación entre Estados Unidos y Rusia. Seguramente en las próximas horas se llevará a cabo un encuentro entre Estados Unidos y Rusia en Turquía.

Todo el tablero mundial, efectivamente, Trump sacude al mundo. Trump está contra el mundo, librando además en el contexto de guerras comerciales, como ya ha quedado de manera patente en este día, que el mundo entero va a recordar.

“La suspensión de la ayuda a Ucrania es un claro indicador de hacia dónde apunta la dinámica internacional. Estados Unidos, que es la superpotencia, está ahora recalibrando y considerando que acercarse a Rusia, levantarle las sanciones, prácticamente otorgarle a cambio de nada los territorios que ya ocupa en Ucrania, está en su interés.

Dijo que “está en su interés en que Rusia recupere su lugar, quede libre de esas sanciones impuestas. La guerra no sólo en Ucrania tiene tres años. La guerra en Ucrania se inició hace 11 años con la ocupación y luego la anexión de Crimea y la guerra del Dombás”.

“Entonces, como conocemos la actuación de Trump, y efectivamente con Trump nunca se sabe, estamos viendo exacerbadas todas las medidas para forzar una rendición, para conseguir que haya un cese al fuego. Y claro, lo que enardeció y enfureció a Trump fue una declaración, probablemente poco reflexiva de Zelenski, diciendo que las posibilidades de la paz estaban más lejanas. La verdad, un momento extremadamente delicado en uno de los conflictos internacionales más graves que hemos visto en los últimos años.

¿Fue emboscada contra Zelenski?

El diplomático y académico consideró que lo sucedido el pasado viernes en el Despacho Oval de la Casa Blanca fue una emboscada premeditada.

“Creo que lo arrinconaron, fue en realidad asediado desde antes. Recordemos que la narrativa de Trump y de su administración volcó las cosas. De pronto Zelenski ya no era un líder demócrata, ni Zelenski encabeza al país agresor y no al país agredido.

“Entonces yo creo que para el viernes Zelenski fue prácticamente conminado, no le quedó de otra más que acudir a la Casa Blanca, habiendo manifestado que no iba o no estaba en condiciones de firmar el acuerdo sobre los recursos minerales sin explícitas y por escrito garantías de seguridad.

“En ese sentido el presidente Trump y el vicepresidente Vance le pusieron una emboscada. Este encontronazo a gritos en la Casa Blanca se explica porque, además, no había las condiciones mínimas. Vance, en primer lugar no debía de haber estado ahí ni intervenir.

“Y el hecho de que todo el tiempo le reclamaran que era un desagradecido, que cómo no estaba agradeciendo la ayuda militar y financiera de Estados Unidos, que además el objetivo último de Trump es recuperar la ayuda militar y financiera.

“Es cobrarle a través de este acuerdo y transferir el costo de la ayuda a Ucrania a los propios ucranianos, lo cual es una verdadera vergüenza en términos de la actuación de los Estados Unidos en otros escenarios de conflicto internacional.

“Vamos a ver qué pasa hoy en la noche. Sabemos que puede improvisar en este informe que no es un informe, sino que es una comunicación sobre el Estado de la Unión ante el Congreso. Trump va a dar su interpretación y va a insistir en que él esté empeñado en la paz.

“Pero la paz, ¿a qué costo? Al costo precisamente de la rendición de Ucrania y al costo de transferir que las garantías de seguridad en Ucrania y en Europa corren solo y exclusivamente por cuenta de los europeos. Entonces, la OTAN está quebrada”.

Un rompimiento con Estados Unidos que la Unión Europea no puede asumir en este contexto internacional.

Lo que es interesante es ver que la reunión de emergencia de esta coalición de una firme voluntad para no abandonar, para no dejar a Ucrania, también los propios europeos reconocen la necesidad de contar con Estados Unidos, porque Estados Unidos es la única superpotencia y tiene, en ese sentido, una posición y una fuerza que es incomparable con el resto de todos los países del mundo.

“En la reunión en Londres, los europeos buscaron y creo que se acercaron un poco a tratar de encontrar la manera en no perder del todo a Estados Unidos. Pero el anuncio del rearme también es para Trump una victoria. Una victoria en el sentido de decir que los europeos se rasquen con sus propias uñas, se defiendan ellos.

Y esto responde mucho a la mentalidad, a la psique de la política exterior estadounidense, que es por un lado aislacionista, aislarse de los problemas del mundo y al mismo tiempo ser un país excepcional.

“Y esto hay que ponerlo en el contexto de la confrontación con China. Hoy a Estados Unidos le conviene tener a Rusia, tratar de distanciar a Rusia de China en su confrontación.

“Y claro, si Trump habla de ‘drill, baby drill, baby drill’ (slogan en apoyo a una mayor perforación de petróleo y gas como fuentes de energía) también lo que quiere es que el petróleo y el gas ruso vuelvan a fluir, que los mercados energéticos vayan en la dirección que Estados Unidos quiere, al diablo con la emergencia climática. Estamos viendo una actuación irresponsable del hombre más poderoso sobre la faz de la Tierra.

“Para Rusia, para el Kremlin y para un canciller de la astucia y la experiencia de Sergei Lavrov, la suspensión de la ayuda es motivo precisamente de celebración. Se deben estar acabando las botellas de vodka en Moscú.

“¿Por qué? Porque para los términos que quiere Rusia, o sea, Rusia quiere una paz en sus términos, y la suspensión de la ayuda va precisamente en esa dirección, pues claro que su retórica es que esta medida debe celebrarse porque acerca más las posibilidades de la paz.

La verdad es que no están negociando la paz, están negociando la rendición.

Jorge Álvarez Fuentes arrojó más luz sobre el tipo de acuerdo que no se llegó a firmar el pasado viernes en la Casa Blanca y sus implicaciones para Ucrania.

“Hasta donde sabemos, el acuerdo fue negociado entre el secretario del Tesoro de Estados Unidos (Scott Kenneth Bessent) y la ministra de Economía de Ucrania. (Yuliia Svyrydenko).

“Ese acuerdo sobre minerales contiene, sobre todo, disposiciones en el sentido de otorgar a perpetuidad a los Estados Unidos los beneficios de la explotación de los recursos minerales de Ucrania, con el componente del establecimiento de un fondo común destinado a la reconstrucción de Ucrania. Digamos, ese es el caramelo del acuerdo.

Pero es en realidad un acuerdo coercitivo, que fuerza a un país invadido y en guerra, a ceder su riqueza mineral en un momento en donde la riqueza mineral y, sobre todo, de minerales estratégicos, marcará o definirá la ventaja estratégica entre unos países y otros.

“Estados Unidos sabe que tiene que avanzar aceleradamente en asegurarse esos minerales estratégicos, el coaltán, el litio, el manadio y otros. ¿Por qué? Porque también respecto del conjunto de minerales que se llama tierras raras, China ya también cerró la puerta. La confrontación se da también en ese plano.

Ese acuerdo que seguramente sabremos y trascenderá de mejor manera en los próximos días su contenido, pues era en realidad una medida ya no de coerción, sino de efectivo chantaje.

¿Qué son y qué importancia tienen las llamadas ‘tierras raras’? Álvarez Fuentes lo explicó así:

“Las tierras raras, hasta donde yo sé, es un conjunto de minerales que tienen importancia, sobre todo porque de su extracción y procesamiento, dependen una serie de procesos tecnológicos hoy directamente vinculados con el orden digital.

“Son minerales y microminerales que se denominan en este conjunto de tierras raras para que se puedan efectivamente producir una serie desde microchips, microprocesadores, pero también otros componentes que van en los automóviles eléctricos que están directamente vinculados a la nanotecnología, a la robótica y a la computación cuántica.

Este es todo un capítulo, la geopolítica de la minería y de los minerales estratégicos juega hoy un papel muy importante. Prueba de ello es que Rusia también en las últimas horas le dijo a Estados Unidos, no te preocupes, si no logras el acuerdo con Ucrania podemos entrar en negociaciones para explotar juntos minerales en los territorios que ya ocupe en Ucrania.

“Hay pocas palabras para momentos como éste, pero sí estamos en un momento crucial respecto de la seguridad internacional y el futuro de la humanidad. Si el país más poderoso del mundo con el hombre que tiene las mayores responsabilidades del mundo es impredecible, es difícil mirar a los ojos de las generaciones futuras el mundo en el que estamos”.

Consulta aquí la entrevista con el embajador Jorge Álvarez Fuentes: