Dice el refrán que “el tiempo es quien da y quita razones”. Una frase que le empieza a pesar y mucho a Zidane tras su empeño de no contar con Ceballos para esta temporada. El francés regresó al banquillo merengue con esa y otras ideas muy claras y lo cierto es que, visto lo visto, el tiempo le está dejando en evidencia a pasos agigantados.
Y es que el sevillano, por su parte, está haciendo mucho y bien para quedarse con esa razón. La razón de que es un gran jugador, de que tiene calidad para jugar en el Real Madrid y de que terminará por triunfar en el conjunto blanco, aunque quizás no con Zidane en el banquillo.
El nivel que mostró en el duelo ante Rumanía fue solo un argumento más que puso el ex del Betis sobre la mesa para hacer ver a todo aquel que sepa algo de fútbol que su marcha del Real Madrid es un error flagrante. Por fortuna para los blancos, si bien aún no se sabe cómo de importante será su ausencia esta temporada en el centro del campo, sí se sabe que el propio Ceballos puede subsanarla con su vuelta la temporada que viene. Pese a que se barruntó la posibilidad de que se marchara de forma definitiva este verano, o con opción de compra asumible para el equipo destinatario, ahora en el Real Madrid se vanaglorian de que terminaran optando por la opción más sencilla y se aseguraran el futuro de Ceballos en color blanco.
Aún así, todo apunta a que Zidane y la directiva se van a pasar toda la temporada viendo las exhibiciones de un jugador como Ceballos que, en tan solo cinco partidos, se ha metido en el bolsillo a la afición del Arsenal y ya comanda la selección española junto a su amigo Fabián Ruiz.
El refrán, como todos los demás del repertorio castellano, ya está actuando y el tiempo le está dando la razón a Ceballos y de qué manera. A Zidane, por su parte, solo le quedan dos opciones: o rectificar el año que viene y contar con el talentoso futbolista utrerano, o seguir pensando que no tiene hueco y buscar en el mercado lo que tiene en el vestuario.
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