No está siendo una temporada nada fácil para Valentino Rossi al que sus tres compañeros de Yamaha han dejado atrás desde hace muchas carreras. Ni ha funcionado su comunión con la M1 2019 ni tampoco el adelanto de piezas del próximo año. Sigue en una deriva peligrosa de resultados y de velocidad en la pista en la que ya no le vale ni apelar al animal de carreras que siempre ha tenido dentro.
Que cayera este domingo en carrera cuando a falta de cuatro giros estuviera peleando por un undécimo y transitando solo a 14”645 de la cabeza es el síntoma de que ya su cabeza no está ya en este 2019 y que debe buscarse alicientes en forma de reset para llegar más fresco de cabeza al 2020.
“Es un momento un poco difícil, porque después de algunas carreras bastante buenas en las últimas tuvimos muchos problemas. Mi ritmo fue constante, pero cometí un error y me caí . Me gustaría ser más rápido para luchar por mejores posiciones pero hoy empecé mal. No tanto en la primera curva, pero luego me encontré en una situación de confusión, parecía una jungla. Creo que me toqué con un KTM a la entrada de diez y los dos nos quedamos abiertos, perdiendo algunas posiciones”.
Y uno de esos proyectos ilusionantes es poder hacer por fin este otoño ese intercambio ya varias veces publicitado de herramientas de trabajo con Lewis Hamilton, par éste la Yamaha M1 y para Vale el Mercedes W10. Es muchísimo más factible este reto que el que en agosto se propusieron a través de le prensa inglesa e Instagram Márquez y Hamilton, ya que les une un patrocinador común que daría palmas si se produce este evento: Monster Energy además de que Petronas, title sponsor de Mercedes, lo es también del equipo satélite de Yamaha.
“Ya llevamos un tiempo hablando sobre cómo hacer este intercambio porque es una cosa preciosa. Están buscando organizar una jornada en la que Lewis pruebe mi M1 y yo pruebe su Mercedes de Fórmula 1. No es fácil. Podría ser una cosa muy guapa porque subirse a un Fórmula 1, aunque sólo sea una vez, está bien”, dice Rossi que ya en 2006 hizo test serios con el Ferrari de F-1 en Cheste y en 2010 repitió en Montmeló.
Por su parte Hamilton, además de ser embajador de MV Agusta y haber diseñado/inspirado una moto, también hizo una prueba el pasado diciembre en Jerez con una Yamaha R1 de Superbikes con Alex Lowes como monitor.
Parece que el circuito Yas Marina de Abu Dabi donde concluirá la temporada de F-1 el 1 de diciembre y los días siguientes hay un tradicional test de tres días de Pirelli podría ser el escenario elegido para el intercambio. Por entonces Valentino ya estará de vacaciones de MotoGP, así que es más probable que antes se produzca el intercambio de cromos a que Hamilton se acerque al The Ranch de Tavullia para una jornada con motos de tierra con Vale y sus chicos, también planeado.
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