Alrededor de 1.200 aficionados del Real Betis se desplazaron este domingo a Granada, donde su equipo les brindó una nueva decepción al perder ante los nazarís, nuevos líderes provisionales de la categoría, y no salir de la zona de descenso a la que cayeron el domingo anterior al perder ante la Real Sociedad. Los hinchas béticos no pararon de animar a su equipo durante el partido, pero al término del mismo entonaron cánticos contra los futbolistas, la directiva y el entrenador, al tiempo que coreaban el nombre de Lorenzo Serra Ferrer.
Al acabar el partido con una nueva derrota, los jugadores béticos se retiraron rápido al túnel de vestuarios, pero Rubi les obligó, casi uno a uno, a que se dirigieran a la zona que ocupaban los aficionados para ir a saludarles y pedir perdón. Entonces tuvieron ocasión de escuchar los gritos de “Jugadores mercenarios”, “Directiva dimisión”, “Rubi vete ya” o “Lorenzo Serra Ferrer” que muchos de los presentes entonaron. En el Benito Villamarín, hasta la fecha, no se habían escuchado gritos contra el entrenador o los jugadores, pero estas dos últimas derrotas fuera de casa ante Real Sociedad y Granada y la caída del equipo a zona de descenso parecen haber colmado el vaso de la paciencia de los aficionados.
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