Alonso, encendido: ”¿Quién es el siguiente?”

“Ha sido el mejor fin de semana en general, de sensaciones, de ritmo, el coche estaba bien y era competitivo respecto a casi todos los rivales, incluso con un Ferrari y con un McLaren, estábamos en una lucha que en Bahrein y en Imola parecía impensable”. Así se mostraba Fernando Alonso este domingo tras el GP de Portugal, satisfecho por su día en el asfalto de Portimao tras una buena remontada con la que logró entrar en los puntos, terminando octavo. Conseguía así dejar atrás un sábado que seguía sin entender. La sesión de clasificación no fue bien para Fernando, terminando 13º mientras su compañero Ocon era 6º. Decía que debía estudiar con el equipo el motivo del cambio de prestaciones de su coche, que había perdido “un segundo respecto a los libres”. Y un día después, el español salió a por todas en pista consciente de que si ejecutaba la estrategia a la perfección, saliendo con un neumático medio que le ofrecía mejores oportunidades que el blando que llevaba la mayoría del Top-10, tenía buenas opciones de puntuar.

Salida complicada

La carrera de Fernando tuvo tres partes bien diferenciadas. La primera, la salida, donde el ovetense sufrió. Y es que como bien recordó en las primeras carreras, el español aún debe acostumbrarse a la reacción al semáforo, al pelotón de la primera curva y a múltiples movimientos que cada vez salen más automáticos y que, con el paso de las citas, irá mejorando. La salida siempre fue uno de sus fuertes, pero ayer perdió una posición en los primeros metros.

Pasó a Stroll y alargó la vida de sus gomas

Posteriormente, pese a saber que no debía entrar en luchas intrascendentes porque debía centrarse exclusivamente en cuidar sus gomas en el primer stint, el español peleó por la 13ª posición con Stroll
, al que terminó pasando definitivamente en la vuelta 21. Ahí, ya pudo poner su foco en alargar su parada cuidando al máximo la vida de sus gomas.

De esta manera, mientras todos hacían sus paradas, el ovetense se mantenía en pista imprimiendo un buen ritmo pese a las muchas vueltas que acumulaban sus neumáticos. Ello le llevó a estar de forma irreal en la sexta plaza tras Ricciardo, que uso su misma estrategia, adelantando puestos en pista debido a que sus rivales habían hecho su parada a boxes.

Dos puestos ganados en boxes

Fernando seguía rodando a buen ritmo y finalmente realizó su parada en la vuelta 41. Con ese primer stint logró un ‘overcut’ sobre Vettel y Giovinazzi. Ya era 11º. Pero no era suficiente. Con gomas duras más nuevas, le quedaban 25 giros para adelantar en pistas a hombres que empezarían a sufrir más la degradación de sus neumáticos. No falló. Empezó a apretar los dientes con un gran ritmo de carrera y adelantando sin titubear a sus rivales haciéndose fuera en el último sector, el de más velocidad, donde más fuerte se mostró su coche (debe mejorar en el paso por curva).

Tres adelantamientos a la perfección

Empezó la cacería de Alonso, que pasó a Pierre Gasly y Daniel Ricciardo para colocarse noveno. “¿Quién es el siguiente?”, preguntaba por radio, encendido, con los ojos puestos en su siguiente estación. “Sainz”, le decía su ingeniero. Y poco después, Fernando superaba a Sainz con facilidad debido a los grandes problemas que tenía el madrileño con sus gomas.

Para entender lo mucho que afectó la estrategia este domingo, solo hace falta ver su pasada a Carlos. Sainz había hecho su parada demasiado pronto, en la vuelta 22 y puso la goma media, mientras que Alonso había puesto el duro en la vuelta 41. La diferencia de gomas era abismal y ello se notó en la facilidad con la que el asturiano pasó al Ferrari del madrileño, que finalmente acabaría 11º.

Marcó su mejor vuelta en el último giro, más veloz que Hamilton

Tras pasar a Carlos, Fernando era 8º y continuó con su gran ritmo para ir a por Ocon. No se conformaba con ser 8º. Quería más. Tanto es así que en su último giro marcó incluso su mejor vuelta personal,
un 1’21”032 con el que superó por ejemplo el 1’22”011 que marcó Hamilton en su última vuelta. Ese giro fue 1”2 más rápido que Ocon, lo que deja claro que si la carrera hubiera durado un poco más, el ovetense podía haber pasado a su compañero.

No hay que olvidar que Esteban, con el mismo coche, había salido desde la 6ª posición, pero llevaba peor estrategia al arrancar con la goma blanda. Alonso terminó a solo 1”059 de distancia del francés en una carrera ejecutada a la perfección por parte de Fernando, que ahora es consciente de que deberá seguir mejorando en su ritmo puro a una vuelta en clasificación, sabedor que la mayor parte de sus opciones en Barcelona y Mónaco, trazados en los que es difícil adelantar, dependerá de la ‘qualy’. Fernando ya está manos a la obra para seguir progresando.