Fernando Alonso saldrá 10º en el GP de Azerbaiyán de F1 2022 en Bakú este domingo (13.00 h) y lo hará con ganas de pescar en río revuelto. A nadie se le olvida lo que el español hizo el pasado año en las calles de Bakú con un Alpine. Max Verstappen había provocado una bandera roja a falta de cinco vueltas y se reanudaría en parado a falta de dos giros. Fernando Alonso salía 10º en una y terminó 6º, ganando cuatro posiciones en solo dos curvas. Esa es la demostración clara de lo que puede ocurrir en Bakú, un trazado en el que hay altas probabilidades de que aparezca un coche de seguridad que lo cambie todo de un momento a otro. El ovetense se aferra a poder aprovechar las oportunidades que surjan en la carrera de este domingo para seguir sumando puntos después de ser 10º en una qualy en la que Alpine volvió a reducir su nivel de competitividad respecto al viernes.
“Una mezcla un poco de sensaciones, porque el viernes en los libres íbamos bastante rápidos, e igual esperábamos un poco más de hoy, pero estamos el 10º y el 13º. Así que un poco la realidad que a veces nos encontramos los sábados. Perdemos competitividad. Pero bueno, contento de la crono en sí, las vueltas han sido buenas, no he tenido grandes problemas, el coche se sentía bien también, pero esas últimas 3 o 4 décimas que nos separan del sexto no las teníamos hoy así que a ver si mañana podemos recuperarlas”, expresó el piloto español en declaraciones a ‘DAZN F1’.
El ovetense afronta la cita de este domingo sin descartar nada por las “trampas” que esconde una pista como Bakú, con los muros tan cercanos y en la que los errores se pagan caros. “Lo hemos visto hoy. Yo he cometido un error en la curva 15. Sebastian (Vettel) se fue contra el muro e esa misma curva…. Van a pasar cosas mañana, así que hay que estar concentrados y no cometer ningún error. Va a ser una carrera llena de trampas y habrá que intentar estar alejado de ellas”.