Los Golden State Warriors celebran el retorno de Andrew Wiggins, pieza clave de su campeonato el curso pasado, tras dos meses de ausencia por motivos personales. El alero ya se entrena para recuperar un nivel físico óptimo, pero en este tramo final de temporada regular no pisará todavía la cancha según confirmó Steve Kerr a una radio local de San Francisco. “Va a seguir trabajando y estará listo pronto”, comentó el entrenador en palabras a Willard & Dibs, de la emisora 95.7 The Game.
Wiggins estuvo alejado del equipo unos 51 días, un hecho que le ha obligado a perderse 23 partidos. Un problema familiar que no ha querido compartir ha sido la causa de su baja voluntaria. Como no juega desde el pasado 13 de febrero, los Warriors han preferido no forzar a pesar de las urgencias en la clasificación.
Golden State tiene dos finales en este tramo final de curso contra los Kings y Blazers. Una derrota puede abrir la puerta a los Lakers y Pelicans, que les siguen empatados en la séptima y octava plaza en la lucha por el play-in. Los Warriors quiere amarrar el pase directo a playoffs, una circunstancia que les daría una semana adicional de preparación para la postemporada.
Según Kerr, Wiggins parece estar muy bien a nivel físico. “Jugó un cinco contra cinco a toda pista. Lleva dos meses sin jugar y está allí fuera corriendo con muy buena apariencia. Necesita un número de días así para estar listo para un partido NBA, y no queremos dejarle en un mal lugar a nivel físico. Debemos asegurarnos de que le damos tiempo para recuperar su fuerza y condicionamento ideal antes de lanzarle a los leones”.