Se acabó la (corta) era del big-three en Brooklyn. El superequipo formado para levantar el título de campeón tendrá que volver a intentarlo el año que viene. Los Brooklyn Nets han dicho adiós a la temporada esta noche tras perder 115 a 111 ante Milwaukee Bucks en el séptimo partido, decisivo, de su eliminatoria.
Giannis
Antetokounmpo fue el encargado de acabar con las aspiraciones de los Nets en una noche histórica en la que cumplió con las expectativas y las etiquetas que el mundo del baloncesto tiene sobre él.
gg.didomi.doWhenConsent(true, “c:twitterwi-wUmBnnKy”, function(){
var fbScript = document.createElement(“script”);
fbScript.src = “https://platform.twitter.com/widgets.js”;
fbScript.async = true;
document.querySelector(“body”).appendChild(fbScript);
} );
El griego terminó con 40 puntos, 13 rebotes y 5 asistencias. Estuvo lejos de la perfección pero cuajó una gran serie de tiro e incluso anotó un porcentaje correcto de personales. Todo parecía haberse alineado para que los Bucks disputasen las Finales de la Conferencia Este.
Y pese a ello, todo acabó decidiéndose en una prórroga de infarto. Así de buenos son estos Nets, que echaron de menos a Kyrie
Irving y vieron como un James
Harden tocado físicamente no era suficiente para acompañar a un Kevin
Durant inmenso.
Ambos jugaron el encuentro completo, 53 minutos de 53 para intentar salvar a los suyos y mantener vivo el sueño. No fueron capaces y el proyecto que lidera Steve
Nash se despide habiendo superado tan solo una ronda. El tiempo dirá cómo debemos tildar este resultado, si de fracaso o no.
gg.didomi.doWhenConsent(true, “c:twitterwi-wUmBnnKy”, function(){
var fbScript = document.createElement(“script”);
fbScript.src = “https://platform.twitter.com/widgets.js”;
fbScript.async = true;
document.querySelector(“body”).appendChild(fbScript);
} );
La igualdad fue la tónica general del encuentro, tanto en el marcador como en las estadísticas. Los mismos puntos en la pintura, los mismos contraataques por equipo y un luminoso que jamás reflejó una diferencia superior a los 9 puntos durante demasiado tiempo.
Así fue que ambos equipos se plantaron en la prórroga. Y lo hicieron porque Durant quiso alargar un poco más el sueño. Una canasta de la estrella de Brooklyn con apenas 1,6 segundos restantes regaló a los suyos cinco minutos más de esperanza. Por desgracia para ellos, no sirvió de nada.
La prórroga fue un cúmulo de nervios, unos minutos en los que ni unos ni otros parecían capaces de cerrar el encuentro. El parcial de 6-2 refleja un tiempo adicional al que llegaron todos fundidos, física y mentalmente. Los Nets tan solo anotaron una canasta y vieron como su temporada se esfumaba lentamente.
Durant terminó con 48 puntos en 53 minutos. Harden se quedó en 22, con una horrible serie en el tiro. Fueron, junto a Bruce Brown, los máximos exponentes del esfuerzo de su equipo. Enfrente, además de Giannis, un Middleton que ha demostrado tener lo necesario para competir, siempre con el cuchillo entre los dientes.
gg.didomi.doWhenConsent(true, “c:twitterwi-wUmBnnKy”, function(){
var fbScript = document.createElement(“script”);
fbScript.src = “https://platform.twitter.com/widgets.js”;
fbScript.async = true;
document.querySelector(“body”).appendChild(fbScript);
} );
Los Bucks se plantan ahora en las Finales del Este, habiendo dejado fuera a uno de los máximos aspirantes al título pero sobre todo con la sensación de haber dejado atrás a los fantasmas del pasado. Tras el triunfo de anoche, será a los de Budenholzer a los que le cuelgue del cuello el cartel de favoritos.
Source link