La vuelta de la NBA ya es una realidad. La liga anunciaba este semana que la competición se reanudará el 31 de julio y que lo hará con un innovador sistema de eliminatorias que finalizará, como tarde, la segunda semana de octubre. Dicho esto, ¿cómo llegan a Orlando las franquicias que se juegan un puesto en Playoff?
Sistema de competición
Lo primordial es entender cómo funcionará el sistema de competición que la NBA ha ideado. Primero, las 22 franquicias invitadas a Orlando terminarán, en cierta forma, la temporada regular con 8 encuentros por cabeza.
Esto lo harán acorde al calendario restante que tenían, pero jugando solo contra los equipos que estén presentes en esta fase final. Algunas franquicias se quedarán a falta de uno u dos encuentros para completar estos 8 partidos y aún falta por conocer cómo procederá la NBA en este caso.
Una vez completado este “final acelerado” de la temporada regular, tendremos que echar un ojo a la clasificación. Para Playoff se siguen clasificando ocho equipos por conferencia pero en este caso, si el noveno clasificado está a menos de cuatro partidos de diferencia del octavo, jugarán una eliminatoria entre ambos.
A la hora de disputar este cruce por el último puesto de Playoff, ambos equipos jugarán un partido que, en caso de ganar el que ocupa la 8º plaza, sellará su billete a la post-temporada. Si en cambio es el 9º equipo quien gana, ambos conjuntos jugarán un segundo encuentro que dictaminará, de forma definitiva, el equipo que accede a Playoff.
Conferencia Este
El asunto en el Este de Estados Unidos es bastante sencillo. La NBA ha invitado a esta fase final a los ocho equipos que ocupaban las posiciones de Playoff y, de forma excepcional, a los Washington Wizards que marchaban novenos.
Por encima de los capitalinos, que hasta el parón de la NBA contaban con 24 victorias y 40 derrotas, se encuentran Orlando y Brooklyn, ambos con 30 triunfos en la clasificación. Para Washington será una tarea difícil pero deberán intentar colocarse a al menos cuatro victorias de cualquier de los dos equipos.
Los Wizards llegarán a Orlando con un Bradley Beal líder de la franquicia y sabiendo que no contarán con John Wall. El base comunicó hace unas semanas que seguía a buen ritmo con su recuperación pero que no volvería para este final de temporada. En frente tendrán a Orlando y a unos Nets que tampoco contarán, tal y cómo han indicado, con Irving ni Durant, ambos recuperándose de sus respectivas lesiones.
Conferencia Oeste
La pelea en el Oeste será mucho más cruenta que en el otro lado del país. Cuando se interrumpió la liga los Memphis
Grizzlies ocupaban la octaba plaza de su conferencia, con 32 victorias y 33 derrotas. Por debajo tienen hasta cinco equipos, todos ellos presentes en Orlando, buscando arrebatarles la plaza.
Portland es la franquicia que marchaba novena, con 29 victorias al momento del parón. Los de Oregon son los únicos que han votado en contra del formato propuesto de la NBA, pese a que seguramente les beneficiase. Los Blazers recuperarán con casi total seguridad a dos piezas clave: Jusuf Nurkic y Zach Collins.
La décima plaza la ocupaban los New Orleans Pelicans, que habían logrado 28 victorias hasta la fecha. La franquicia era una de las grandes atracciones de la liga con la vuelta de Zion Williamson y seguro que dará mucho que hablar en Orlando. En términos de marketing, a la NBA le interesa tener a Zion en pantalla, así que habrá que estar atentos a los Pelicans.
Empatados a 28 triunfos con New Orleans tenemos a Sacramento. La franquicia californiana empezó el año como un tiro para luego desinflarse. Tras el parón All Star parecían haber recuperado el ritmo pero les falta mucha experiencia y profundidad de banquillo. Fox y Hield intentarán liderar el asalto de los Kings a la octava plaza.
Aún quedan dos franquicias más en la terna y una es una vieja conocida. Los San Antonio Spurs de Gregg Popovich volverán a jugar por meterse en unos Playoffs por enésima vez y ya van quién sabe cuantas… Los de Texas no estaban cuajando su mejor año pero a la hora de la verdad cuentan con la experiencia suficiente para dar el callo ante cualquier equipo. Cinco victorias les separan de los Grizzlies.
Por último tenemos a Phoenix, una franquicia joven y con poca experiencia pero liderada por DeAndre Ayton y Devin Booker, dos jugadores con un potencial tremendo y capaces de reventar cualquier partido. Los Suns tenían 26 victorias cuando se paró la NBA y tienen la papeleta más difícil de todo. No obstante, en un escenario tan incierto y desconocido no podemos descartar a nadie.
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