Batum: "Nos ven ricos, pero los jugadores de la NBA también somos humanos"

Batum: "Nos ven ricos, pero los jugadores de la NBA también somos humanos"

Nicolas Batum (Lisieux, Francia, 14-12-1988) siente que ha vuelto a la vida, a nacer en el baloncesto, resurgido en estos revitalizados Clippers. No suele esperar la NBA a nadie pero siempre hay un lugar para tipos de la generosidad y el espíritu de superación del contrastado alero, hoy colaborador fundamental de la sociedad Paul George & Kawhi Leonard.

Moldeada su fortaleza mental por las penas desde los 2 años, cuando vio desplomarse y morir a su padre en un partido de baloncesto, Batum se acabó de curtir, de hacer más duro, cuando superó una casi ruptura del basket en 2020, tan devastado por dentro tras su triste final en los Charlotte Hornets que pensó en la retirada. Le dolió no satisfacer a aquellos que tanto le exigían para justificar el contrato de 5 años y 120 millones que firmó con la franquicia de Michael Jordan en 2016, tanto, que hasta pidió perdón.



Pero estaba del todo aquello justificado, pues supuraban llantos del interior de Batum antes de los partidos, abrumado por el miedo a la muerte hasta que su hijo no cumplió los 3 años al recordar lo que le había sucedido a su padre cuando él tenía esa edad. Iba a despedirse del baloncesto cuando Tyronn Lue le reclutó para convertirle en 2020 en los Clippers uno de sus hombres de confianza, esta temporada desde el banquillo.

Los buenos números como suplente miden la alegría con la que el ex de Blazers y Hornets vuelve a vivir el baloncesto, con 6,3 puntos, 4,3 rebotes, 1,5 asistencias en 22 minutos con un 40% en triples y un más-menos de +2,7. De su interior y de lo que se puede esperar de estos Clippers y de la selección francesa se sienta a hablar unos minutos con MD un relajado y reflexivo Nico Batum.

Se le ve muy bien en la pista y ejerciendo un rol importante en el equipo cuando hace dos años casi se retira.

Pasé por una mala situación en mi ex equipo. Desde hace 3 años vuelvo a ser feliz jugando a baloncesto. Jugar para el equipo, jugar por algo, tener mi rol en esta etapa de mi carrera…Estoy feliz por ello.

Como usted, otros jugadores de la NBA como DeMar DeRozan y Ricky Rubio han hablado también estos últimos años de sus problemas de salud mental y cada vez más. ¿Cómo lo valora?

Es una buena cosa. Percibimos los problemas que hay fuera como la inflación o el Covid-19. Desde fuera parece que no nos importe, sólo se ve que somos ricos. Pero también pasamos momentos duros y necesitas abrirte y hablar, no importa quién eres. Pasamos por lesiones, por temporadas de no jugar, problemas con la familia… Somos humanos.

“Los jugadores también pasamos momentos duros y necesitamos abrirnos y hablar”

Tyronn Lue fue quien le ‘rescató’ del retiro, llegó incluso a decir que le ‘salvó’ la vida. ¿Cómo ha influido en su resurgir?

Tengo una gran relación con él, una gran relación, me ha dado un rol. Con tantos jugadores en este equipo mi rol es muy fácil, no tengo que hacer nada muy especial, sólo tengo que ser yo mismo, estar listo para salir a la pista, jugar, encajar con Kawhi, George, Norman Powell… Encajo con todos y tu ya ves qué tienes que hacer.

¿Recuerda alguna conversación especial que tuviera con él?

Ninguna especial, cada día tenemos una.

¿Qué rol exactamente le da en la cancha?

No tengo un rol específico, soy como un chico ‘pegamento’. No me importa salir y no meter puntos, tengo 34 años y llevo 15 en la NBA, todo va de hacerle la vida más fácil a los demás de la manera más sencilla que pueda. Se trata de meter tiros abiertos, darle ritmo el ataque, defender duro, facilitar el ‘spacing’…

Nicolas Batum, junto a su ‘salvador’, Tyronn Lue

Getty Images

A Kawhi Leonard y Paul George se les ve muy bien. ¿Son uno de los grandes contendientes al anillo si se mantienen sanos?

Somos uno de esos equipos, jugamos para algo grande. Hay muchos jugadores alrededor de ellos y cada uno conoce bien su rol, Luke (Kennard) el tiro, Zubac controlar la pintura, tenemos grandes bases, Marcus Morris también hace un buen trabajo… Cuando estamos juntos sabemos espaciar la pista y es muy fácil jugar como equipo.

Tiene contrato hasta 2024 y todavía le queda cuerda en la NBA pero, ¿se ve jugando en un futuro en el ASVEL Villeurbanne? Tony Parker, ahora presidente del club, lo dejó caer.

No lo sé (risas). La NBA me va, no lo sé, puede… Me encanta esta liga, mientras tenga la oportunidad de quedarme, la aprovecharé. Estoy en la mejor liga del mundo, en el mejor equipo del mundo…voy a aprovechar este regalo.

“¿El anillo? Jugamos para algo grande”

Este último verano renunció al Eurobasket para centrarse en la preparación de la temporada. ¿Le volveremos a ver en la selección francesa en este que viene? Jugará también Wembanyama y el juego interior que pueden tener junto a Gobert como Embiid elija Francia será aún más interesante.

Buff, como tengamos a esos tres chicos… me tomaré un descanso otra vez (risas). Vamos a volver, tenemos un buen equipo, tenemos unos Juegos Olímpicos en casa por delante… Sí, yo volveré. Me retiraré de la selección tras los Juegos Olímpicos, eso seguro, pero me quedan dos veranos seguro, este y otro más, vienen dos grandes veranos.

Batum, en los Juegos Olímpicos de Tokio, en los que se colgó la plata con Francia

Batum, en los Juegos Olímpicos de Tokio, en los que se colgó la plata con Francia

Getty Images

-Estos últimos años España siempre ha ganado a Francia con la final del Eurobasket como último precedente. La última vez que ganaron ustedes fue en el Mundial de 2014. Se decía que ustedes tenían mejor equipo en el Eurobasket, ¿cuáles son las claves?

Sí, también el Eurobasket de 2015… Tenéis a Sergio Scariolo. Nosotros tenemos mejor equipo sobre el papel, pero mira, estaba Eslovenia con Doncic, Serbia con Jokic, Grecia con Antetokounmpo… Pero España lo hizo otra vez, es buen equipo, sabe cómo ganar. Ahí sigue Rudy Fernández, jugué con él (en los Blazers) y me encanta, parece que va a jugar para siempre (risas). De todas maneras, también tenéis una buena generación de jóvenes subiendo.




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