Berizzo: “No me esperaba la destitución en el Sevilla y no me gustó”


Eduardo Berizzo, ex entrenador del Sevilla, ha criticado la forma en que fue destituido en el club blanco justo después de ser operado de un cáncer de próstata. En una entrevista en el diario ‘La Nación’, el actual seleccionador de Paraguay asegura que fue injusta una decisión que el club andaluz tomó en diciembre de 2017.



”No me lo esperaba y no me gustó, no me pareció justo, porque la realidad del equipo no era mala: habíamos clasificado a octavos en Champions, habíamos pasado en

Copa del Rey
y estábamos quintos en la Liga, pero la directiva habrá pensado que estaba débil, que no iba a poder. Ése es el problema de contar cosas de este tipo en nuestra profesión. ¿Qué jugador dice que tiene miedo? Si dice eso, lo sacan. Y en este caso yo nunca perdí la fuerza, al contrario, bajé unos kilos, que mal no me venían (risas), pero la fuerza no la perdí”, aseguró el entrenador argentino, que relató cómo gestionó la situación en el vestuario. “Tenia que operarme y no podía estar en los entrenamientos, no me quedó otra que contárselo a los jugadores. Les dije que iba a ausentarme 2 ó 3 semanas por la operación, y justo venía el parón de diciembre, así que me perdí 2 ó 3 partidos de Liga y uno de Champions (que dirigió Ernesto Marcucci). En grupo los jugadores me dieron fuerza y luego por privado manifestaron cierta preocupación, y al final yo los alentaba a ellos, los tranquilizaba”.

Berizzo
contó también cómo le detectaron la enfermedad. “Me hacía chequeos de inicio de pretemporada como todos los jugadores, dio alto el valor de PSA (Prostate Specific Antige), seguí controlándome y el índice no bajaba. En Sevilla me hicieron una biopsia, me citaron los doctores y me informaron que tenía un tumor en la próstata. La palabra cáncer es muy intimidante, pero no es sinónimo de muerte, evidentemente un cáncer de próstata te deja muchas más opciones de luchar que uno más agresivo. Inclusive tampoco me siento una referencia en la lucha contra el cáncer. Les pregunté a los médicos qué había que hacer, me contestaron que operar y les dije: “Vamos ya”. Ahí no hay muchas opciones para escoger: te suben al ring y el que viene enfrente te viene a pegar, entonces o subís la guardia o te pegan”.


Source link