Real
Betis y Real
Sociedad dirimen este martes un interesante encuentro de octavos de final de la Copa
del
Rey en el Benito
Villamarín (21h, DAZN), donde los verdiblancos tratarán de mantener su dominio en los duelos directos en el torneo del KO -han ganado cuatro eliminatorias de cinco- y los donostiarras, su supremacía en los últimos enfrentamientos, pues ganaron 0-3 el pasado octubre en Heliópolis y este sábado dejaron escapar un 2-0 en los cinco minutos finales (2-2), lo que les impidió romper la pésima racha de resultados que arrastran desde finales de noviembre, ya que solo han ganado dos de sus quince últimos partidos oficiales.
Esa remontada permite a los verdiblancos seguir invictos en los seis partidos que llevamos de 2021, pues suman cuatro victorias y dos empates en los seis partidos del año, un hito que solo en dos ocasiones (1981 y 1995) superaron a lo largo de su historia en el comienzo de un año natural.
Varios cambios
Manuel
Pellegrini tratará de mantener la racha y para ello piensa hacer algunos cambios en el once inicial, para el que seguirá sin poder contar con piezas clave como Guido
Rodríguez, Claudio
Bravo, Aitor
Ruibal o Marc
Bartra, y ha decidido dar descanso a Loren
Morón y Juan
Miranda, titulares en todos los partidos de Liga en lo que va de año y con menor protagonismo en la competición del KO.
Futbolistas otrora titulares como William
Carvalho, Álex
Moreno, Tonny
Sanabria o el incombustible Joaquín recuperarán protagonismo en este choque de altura en el que está en juego el pase a los cuartos de final de la Copa
del
Rey, que hace dos años ya lograron los béticos tras eliminar en doble partido a los donostiarras, que aún tienen pendiente jugar con el Athletic en la Cartuja la final de la edición de 2020.
Silva se lo pierde
En las filas realistas, Imanol
Alguacil sigue sin poder contar por lesión con David
Silva, una de sus grandes estrellas, –tampoco con el guardameta suplente Miguel
Ángel
Moyá y Luca
Sangalli– pero se lleva al ya ex sevillista Carlos
Fernández, fichado durante el fin de semana y que rápidamente vuelve al otro barrio de su ciudad tras completar apenas dos entrenamientos con sus nuevos compañeros. Los donostiarras juegan el sábado próximo en el campo del Villarreal -el Betis lo hará el lunes ante Osasuna– y algún cambio hará también el técnico donostiarra para refrescar el equipo, que tuvo un arranque de campeonato sensacional y lleva meses encallados, con nueve empates, cuatro derrotas y solo dos victorias –Athletic en LaLiga y Córdoba en Copa del Rey, ambas a domicilio- en los quince últimos partidos.
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