Barack Obama ha defendido este sábado a Joe Biden de los señalamientos de Donald Trump en los que le acusa de estar con los regímenes chavista y castrista. “Joe Biden no es un socialista”, ha dicho fuerte y claro el expresidente sobre el candidato demócrata en un mitin en la Universidad Internacional de Florida, en Miami. En las últimas semanas, el republicano ha llamado a su oponente “socialista” y “comunista” con el objetivo de obtener el voto de los exiliados cubanos y venezolanos de Florida. Obama ha desmentido las palabras de Trump y ha añadido: “Joe promoverá los derechos humanos en Cuba y en el mundo, no va a mimar a los dictadores como hace Trump”.
Obama habló desde un sobrio escenario, con ningún espectador a menos de 30 metros. Desde el estacionamiento se divisaba una cabeza pequeñita hablando en la sombra, aunque en la pantalla apareciera iluminado a todo color. Desde lo lejos muchos demócratas esta tarde observaban la esperanza de cambio de este país que el expresidente representó en 2008 y sigue —cuatro años después de dejar su puesto— representando. Este ha sido el segundo acto de campaña en el que Obama participa en la recta final de las elecciones. El miércoles, reapareció en la escena política para dar un discurso en Filadelfia, lo que indica que los demócratas están reforzando la campaña en los Estados pendulares con las apariciones del expresidente. Florida es un Estado crucial para las dos campañas: allí se cuentan 29 de los 270 votos electorales que necesita cualquier candidato para convertirse en el próximo presidente de Estados Unidos.
La entrada al campus de la Florida International University, al norte de la ciudad, parecía a las dos de la tarde una isla de paz dentro del caótico y polarizado Miami de estos días. Unas decenas de familias silenciosas, con sus sillas y algunas banderas, esperaban al lado de su coche en el estacionamiento a que comenzara el mitin como si fueran a ver una película. Una pantalla a lo lejos y en los altavoces, Bruce Springsteen. En esta zona acomodada todo parece organizado y silencioso. Lejos quedan los arrancones de pick up en la calle 8 de Little Habana gritando por Trump. Si alguien que camine por las calles estos días y escuche a la comunidad cubana o venezolana comparar a Biden con Castro se pregunta dónde están los demócratas de esta zona del país, es aquí, en sus coches, con sus refrescos, esperando pacientemente a Obama.
Marcy Grosso y su hermana Vivian Bertier, de 53 y 58 años, las dos cubanas pero criadas desde los ocho años en Miami cuentan lo difícil que es ser cubana en la ciudad y apoyar a Joe Biden: “No te puedes imaginar lo frustrante que es”, resume Bertier. Grosso enumera los motivos por los que Trump “es más parecido que ningún otro líder” a un tirano y su discurso se acelera: “Les zumba el mango que le digan a uno comunista. Imagínate, que a una cubana le digan comunista, es tremendo”, se desahoga frente a su coche en el estacionamiento, a unos 50 metros del escenario.
A unos metros de las hermanas, junto a una camioneta morada con unas niñas aburridas en el techo, María Chirino, de 72 años, llegó a Miami hace 50. “Yo vengo de Cuba. Sé lo que es esto. Él looks like a [se ve como un] tirano, no los demócratas”, insiste. A su lado, su hija tiene un brazo amputado, y la señala: “Necesitamos a alguien que nos garantice el derecho a la salud”.
Obama puso el foco, precisamente, en el futuro de la sanidad para la población latina. “La pandemia ha golpeado a los latinos y a los afroamericanos más que a ningún sector en Florida”, dijo. El expresidente ha acusado a Trump de ser negligente en la atención de la pandemia del coronavirus y en intentar terminar con el Affordable Care Act, conocido popularmente como Obamacare, el programa de acceso al seguro médico que implementó cuando fue presidente y que Trump ha intentado eliminar. “¿Por qué querrías cargarte la sanidad en el momento en el que la necesitamos más?”, ha cuestionado. Según, Obama el 93% de los hispanos en Florida se han apuntado al programa. “Yo sabía que Trump no iba a acoger mi visión”, ha reconocido.
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