En apenas dos meses de competición, Brahim ya puede confirmar que su marcha al Milan ha sido todo un acierto. El malagueño, que durante sus años en Madrid estaba condenado a la suplencia, está encontrando su sitio en el conjunto lombardo donde ya es una pieza muy importante.
Su gol este jueves en la Europa League ante el Celtic (4-2) saliendo desde el banquillo, confirmó una tendencia: apunta a ser un jugador diferencial. Pioli, su entrenador en Milán, le está dando confianza y Brahim está respondiendo y ya acumula 13 partidos en los que ha marcado cuatro goles (Tres en Europa y uno en Serie A).
Zidane le echa en falta
El fútbol, muchas veces, da y quita razones a los entrenadores y, en esta ocasión todo indica que a Zidane le ha descubierto un error, el de dejar marchar a Brahim cuando este podía ser una pieza determinante y más en esta temporada tan atípica.
De hecho, ahora que al equipo blanco le falta mordiente arriba, es posible que Brahim hubiera podido abrirse un hueco en el once. Sin embargo, ahora, el malagueño está dando su calidad al conjunto rossonnero y ganándose, eso sí, una oportunidad más importante en el conjunto blanco.
Milanello amanece cubierto de nieve
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