La Comisión Europea ha cerrado el expediente abierto contra Telefónica Deutschland por la compra de E-Plus en 2013 al considerar que la filial alemana no incumplió las condiciones que se le impusieron para poder adquirir la operadora. De esta forma, Telefónica evita una multa millonaria que podría haber alcanzado el 10% de los ingresos de la filial, que en 2020 facturó 7.532 millones de euros, o incluso la revocación de la autorización comunitaria.
Bruselas abrió en febrero de 2019 un expediente contra Telefónica Deutschland, a la que acusaba de incumplir las medidas correctivas que prometió adoptar para obtener el visto bueno de las autoridades europeas para la adquisición de E-Plus a la holandesa KPN, que dio lugar al tercer operador alemán, solo por detrás de Deutsche Telekom y Vodafone.
En concreto, el pliego de cargos del Ejecutivo comunitario estimaba que la filial alemana de Telefónica no había implementado correctamente su obligación de ofrecer servicios mayoristas de telefonía móvil 4G a todos los actores del mercado interesados a los “mejores precios bajo condiciones de referencia”. Pero dos años después, la Comisión Europea ha estimado las alegaciones de la multinacional española y ha cerrado el expediente definitivamente.
Telefónica anunció en 2013 la compra de E-Plus por 5.000 millones de euros a la holandesa KPN, que además se hizo con el 20,5% del capital de Telefónica Deutschland. La operación fue autorizada por Bruselas en 2014, aunque sujeta a una serie de condiciones para asegurar la competencia en particular en el mercado mayorista de telefonía móvil.
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