Carlos Beltrán fue despedido de su rol como mánager de los Mets de Nueva York debido a su presunta participación en el escándalo de robo de señas de los Astros de Houston.
La semana pasada, los Astros y los Medias Rojas tomaron la decisión de terminar los contratos con sus timoneles, luego de que las Grandes Ligas concluyese que participaron en el robo de señas. En tanto, los Mets habían guardado silencio sobre el futuro de Beltrán.
Houston destituyó a AJ
Hinch el lunes, una hora después de que el comisionado Rob Manfred divulgó sus
hallazgos sobre el caso. Boston anunció el martes la salida del astro boricua
Alex Cora. Y ahora es el turno de Beltrán.
En comunicado de nueve
cuartillas que emitió Manfred, Beltrán fue el único pelotero identificado de
forma directa dentro del esquema para robar las señas.
Cora fungía como
asistente del mánager de los Astros en 2017. La investigación apuntó a que el
boricua era el autor intelectual. Según la pesquisa, una cámara fue instalada
detrás del jardín central y un monitor cerca de la cueva, esto con el fin de
captar las señales de los receptores rivales.
Hinch y el gerente general de los Astros, Jeff Luhnow, fueron suspendidos por una temporada antes de su despido, aunque Manfred decidió no sancionar a los jugadores.
Los Mets contrataron a
su exestrella hace solo dos meses para reemplazar al despedido Mickey Callaway.
Beltrán pasó parte de
siete de sus 20 temporadas de MLB con los Mets y firmó un contrato de tres años
que incluía una opción de club para 2023.
Como jugador, firmó un
contrato de siete años por $ 119 millones con los Mets en enero de 2005 y los
ayudó a ganar la División Este de la Liga Nacional en 2006.