‘Es tiempo que la FGR llame a comparecer a todas estas personas que parece tienen información; al acudir ya no podrán mantenerse en este entorno de las verdades a medias’, señaló Reyes Orona.
¿Hay o no un acuerdo entre el gobierno de Estados Unidos y García Luna?, preguntó Alfredo Figueroa, exconsejero del IFE, durante la Mesa de Análisis de Aristegui En Vivo. A su parecer “todo indica que debe haber un acuerdo”, pues tras la detención de quien fuera titular de la Agencia Federal de Investigación (AFI) y de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), no solo ha sido señalado por testigos del juicio contra Joaquín, El Chapo, Guzmán, sino por otros grupos del crimen organizado.
“Vamos poco a poco desmenuzando una madeja que vamos a ir conociendo y que va a ser muy trascendente en las próximas semanas, meses y años de información”, dijo.
“Todo indicaría que no hay ninguna resistencia para moverse, no hay una declaración de culpable o no culpable. Yo sigo pensando que en esta trama hay más acuerdos que desacuerdos y hay seguramente muchos más elementos de los que hoy conocemos en donde a lo mejor el propio García Luna va a terminar contando una historia que implica al crimen organizado y a un conjunto de elementos de de la clase política mexicana”, agregó.
No obstante, consideró que este caso también se debe poner en la conversación la implicación de las agencias de Estados Unidos, como la DEA o la CIA, con el crimen organizado. “No debiéramos olvidar que quienes le dan la bendición al hijo del Mayo Zambada para darle la información a la DEA, quien hace el contacto, quienes tenían años haciendo contacto con la DEA son El Chapo y El Mayo a espaldas de la gente que en realidad participaba con ellos en el narcotráfico”.
“Una de las revelaciones del libro de Anabel es que son ellos dos los que le dicen: esta es la persona con la que te vas a ver de la DEA, este es el abogado que trabaja para la DEA pero también para el Chapo y es el abogado que lo conduce con todos los agentes de ese mundo”, manifestó el también analista político-electoral.
Por su parte, el exprocurador fiscal, Gabriel Reyes Orona, apuntó que toda la indagatoria que ya se tiene debe ser sacada del terreno político y mediático antes de que inicie el asunto de extradiciones que a su parecer van a venir porque el caso de García Luna ya apunta a un “asunto netamente pandillesco” y obviamente el gobierno de Estados Unidos empezará a solicitar que declaren en en ese país todas las personas involucradas.
“Me refiero a que el asunto no debe permitir a Felipe Calderón y sus secuaces seguir haciendo declaraciones en Twitter o cualquier otro medio que le permita seguir en el terreno de las verdades a medias en el que siempre ha vivido”, subrayó.
“Es tiempo que la Fiscalía General de la República inicie un proceso, que llame a comparecer a todas estar personas que parece tienen información sobre el particular, al acudir ya no podrán mantenerse en este entorno de verdades a medias de decir no me acuerdo”, abundó.
Reyes Orona criticó que a una semana de la detención del exsecretario de Seguridad Pública en Texas, Estados Unidos, las autoridades mexicanas solo siguen haciendo declaraciones sin iniciar un proceso, “no hay carpetas de investigación, no hay citaciones, no hay el conocimiento de aprehensiones de personajes que ya han sido nombrados y que siguen circulando libremente por las calles sin haber hecho alguna declaración formal que los vincule y que pueda ser utilizada después como una declaración de falsedad”.
“No está haciendo el fiscal realidad esta obligación que tiene de que los mexicanos conozcamos qué pasó”, acotó.
Por su parte Alfredo Figueroa, refirió que aunque en el pasado se dijo que lo que se vivió en el país durante el sexenio de Felipe Calderón fue una lucha entre grupos criminales, la realidad que hoy se puede ver es que en este periodo las bandas del crimen organizado secuestraron a las instituciones.
“La guerra no era entre la policía y el narco, no sucedió en los términos en los que se ha narrado en el país. Lo que vivimos fue una guerra entre criminales y lamentablemente con el Estado apoyando a un lado u otro de la ecuación”, afirmó.
Sostuvo que parte de lo que puede hacer Genaro García Luna es revelar muchas cosas y consideró que si Calderón Hinojosa no sale pronto a actuar y a decir lo que sabe, “mucho me temo que va a terminar en haber sido un encubridor”.
“Me parece que es el momento de empezar a contar algunos de esos secretos porque ha dado un paso el gobierno de Estados Unidos acusando a García Luna. Si Felipe Calderón y los que siguieron, Enrique Peña Nieto, y los que están en el poder no actúan y no dan un paso para decir lo que está pasando, mucho me temo que todo va a estar en manos en aquel lado del río Bravo y acá veremos reacciones”, expuso.
Al respecto, Gabriel Reyes Orona coincidió en que las autoridades mexicanas no pueden seguir adelante sin resolver este caso, sin revelar quiénes fueron los que tendieron un manto sobre el crimen organizado “porque tuvieron cuando menos 10 años para incorporar enormes fortunas al sistema financiero mexicano, para constituir y formar empresas, para apoyar o combatir funcionarios públicos, para crear partidos y para apoyar campañas electorales”.