El director deportivo del Espanyol, Fran Garagarza, tiene mucho trabajo por hacer. Presentado el pasado viernes transmitiendo la necesidad de que todos los estamentos del club unan sus fuerzas con el objetivo común del ascenso, el nuevo arquitecto blanquiazul tiene deberes desde ya, existiendo multitud de incógnitas en materia de ‘mercato’ a tan solo 48 horas de que arranque la pretemporada perica.
El Espanyol 2023/24 arranca pasado mañana y lo hará sin incorporaciones en lo que a su plantilla se refiere. Regresan los cedidos Tonny Vilhena, Landry Dimata, Álvaro Vadillo, Miguelón y Pol Lozano, pero el caso de cada uno de ellos es diferente. Este último sí tiene serias opciones de formar parte de la plantilla de Luis García, aunque cabe puntualizar que finaliza contrato en junio de 2024 y sin duda que se antoja necesaria una renovación si se cuenta con él de cara al medio/largo plazo. Vilhena y Dimata son aprovechables para Segunda, pero está por ver qué piensa Luis García al respecto, y en cuanto a Vadillo y Miguelón, a los que les queda un año de contrato, es poco probable que no vuelvan a salir a lo largo del verano.
Ocho salidas desde el descenso
A la espera de fichajes, lo que sí se han confirmado desde que el Espanyol perdió la categoría han sido un total de ocho bajas. Por una parte, los cinco jugadores que estaban cedidos en el Espanyol (Álvaro Fernández, Pierre-Gabriel, Vini Souza, Denis Suárez y Dani Gómez), por otra Adri Pedrosa y Aleix Vidal, que finalizaban contrato, y por último Joselu, cedido al Real Madrid.
No obstante, la lista de futbolistas por los que otros equipos han preguntado es extensa. En la misma están Fernando Pacheco, César Montes, Leandro Cabrera, Brian Oliván, Sergi Darder, Edu Expósito, Javi Puado y Martin Braithwaite. Todos ellos, sin embargo, con contrato y jugadores importantes que, en condiciones normales, cuentan para Luis García. El asturiano ya aviso: “Esto no será un mercadillo”.