El Villarreal acabó salvando los muebles en la primera jornada de la Conference League ante un Lech Poznan que puso las cosas difíciles desde el primer minuto de juego. Con el resultado en contra desde el inicio, el equipo ‘groguet’ supo imponer su superioridad, aunque varios errores inocentes acabaron por complicar un triunfo ‘in extremis’ que Francis Coquelin determinó en el 89′ (4-3).
Inicio para olvidar de un Villarreal adormecido en los primeros instantes del encuentro ante un Lech Poznan que no dudó ni un segundo en ahogar con una presión muy alta la salida del club ‘groguet’, propiciando un malentendido entre el lateral diestro, Adrián de la Fuente, y el guardameta, Filip Jörgensen, cuando el español intentó salir con el balón jugado y erró en una devolución al portero. El delantero del Poznan, Mikael Ishak, estuvo atento y robó el balón, que quedó en tierra de nadie, para cedérselo a Michal Skoras quien remató a puerta vacía.
Transcurrían dos minutos y el Villarreal ya marchaba con un 0-1 en contra en el marcador que lo obligaría ir a remolque durante toda la primera mitad. Pero ello no le supuso un problema, más bien una motivación. La primera mitad se fue tiñendo de amarillo a medida que el club ‘groguet’ remontaba en el juego y también en el marcador, con tres tantos en tan solo ocho minutos.
El gol de las tablas vino como un obús. Desde la banda izquierda Johan Mojica envió un balón teledirigido hacia la zurda de Samu Chukwueze, que la enganchó de primeras para poner el esférico en la escuadra derecha de Filip Bednarek.
El segundo llegó cuatro minutos después, tras una recuperación en campo rival de José Luis Morales, que aprovechó para asistir a un Álex Baena afortunado en su disparo, tras tocarla el defensa Antonio Milic, desviando su trayectoria y despistando al portero.
Villarreal-Lech Poznan, en imágenes
Baena tardó cuatro minutos en repetir diana. Esta vez fue Chukwueze quien le puso un centro con música al español, para que la clavara con clase muy cerca del poste.
El inicio de la segunda mitad volvió a ser un calco del inicio del encuentro. El Villarreal cedió el segundo gol polaco en un nuevo despiste defensivo. Aïssa Mandi provocó un penalti inocente por mano e Ishak recortó distancias enviando el esférico a donde Jörgensen no pudo llegar.
Si bien es cierto que el Villarreal mantuvo la iniciativa del encuentro, el nivel fue bajando poco a poco, lo que provocó que el club polaco aprovechara un nuevo desajuste defensivo para poner un balón a la espalda de la defensa amarilla que volvió a transformar Ishak, cruzándola hacia la izquierda de la meta de Jörgensen. Volvían las tablas al electrónico (3-3).
Con el encuentro totalmente roto, la balanza pudo decantarse hacia cualquier lado, pero el público del Ciutat de València apretó para que cayera del lado local. Coquelin salvó los muebles en el minuto 89 tras conseguir enganchar un balón rebotado en la frontal y ponerla de volea lejos del alcance de Bednarek.
Debut agridulce en Europa de un Villarreal que supo demostrar su superioridad, aunque no la pudo mantener, cometiendo errores que acabaron pagando caro, pese a la victoria ‘in extremis’.
FICHA DEL PARTIDO
Villarreal: Jörgensen; de la Fuente (Kiko, 64′), Mandi, Cuenca, Mojica; Chukwueze (Pino, 80′), Coquelin, Morlanes (Parejo, 64′), Trigueros (Jackson, 46′); Baena, Morales (Moreno, 64′)
Lech Poznan: Bednarek; Rebocho, Milic, Dagerstàl, Pereira; Murawski, Karlström; Skoras (Tsitaishvili, 78′), Kvekveskiri (Sousa, 90′), Amaral (Szymczak, 71′); Ishak (Velde, 78′)
Goles: 0-1 Michal Skoras (2′), 1-1 Samu Chukwueze (32′), 2-1 Álex Baena (36′), 3-1 Álex Baena (40′), 3-2 Mikael Ishak (46′), 3-3 Mikael Ishak (61′), 4-3 Francis Coquelin (89′)
Tarjetas: AMARILLAS: Aïssa Mandi (46′), Jorge Cuenca (51′), Samu Chukwueze (64′), Álex Baena (83′), Radoslaw Murawski (85′)
Árbitro: Ali Palabiyik (Turquía)
Espectadores: 10.385 en el Ciutat de València