El presidente chileno Sebastián Piñera anunció hoy una “cirugía mayor al sistema de pensiones” con la ampliación de un plan de ayuda a la clase media, con el que busca frenar una reforma constitucional que habilitaría a los chilenos a hacer un retiro parcial (hasta el 10%) de sus fondos en las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP).
Piñera afirmó que la ayuda a la población “no puede ser a costa de reducir sus ahorros previsionales” – las AFP manejan activos por más de u$s 200.000 millones– y aseguró que su gobierno ha trabajado por mejorar las pensiones con varios proyectos. El sistema previsional es, precisamente, un reclamo histórico de un amplio sector de la población chilena debido a las bajas pensiones que pagan a los afiliados.
El Plan Fortalecido de Protección de la Clase Media incluye un aporte directo por 500.000 pesos chilenos (u$s 630) para aquellas pers,onas (ya sean trabajadores activos, suspendidos o cesanteados, desempleados y cuentapropistas) con ingresos mensuales entre $500 mil y $1,5 millón de pesos chilenos (u$s 630 y u$s 1902) que hayan sido afectadas por la pandemia. También se contempla un Crédito Estatal Solidario por hasta 2.600.000 pesos chilenos (u$s 3303) en cuatro cuotas mensuales de $ 650.000, con el objetivo de compensar hasta el 70% de la caída de ingresos.
Además se prevé una postergación de hasta seis meses en el pago de determinados créditos hipotecarios; una apertura “excepcional” para que los estudiantes universitarios (la medida apunta a un universo de 130.00 personas) puedan aplicar a un Crédito con Garantía Estatal para la Educación Superior; y la ampliación a $250.000 (u$s 317) mensual del subsidio para alquiler de viviendas de $600.000 (u$s 762) por tres meses.
“Nuestro gobierno ha desarrollado un plan fortalecido de protección a la clase media (…) que requiere un enorme esfuerzo fiscal”, dijo Piñera durante al anuncio. El gobierno ya ha desembolsado cerca de u$s 16.750 millones (un 6,7% del PBI chileno) en programas de asistencia a personas y empresas en el marco de la pandemia de coronavirus que, hasta ahora dejó 319.493 infectados y 7069 muertos en el país trasandino.
A principios de julio, el gobierno había lanzado un plan similar pero la oposición lo consideró insuficiente.
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