Curry y Thompson brillan para meter a los Warriors en las finales de conferencia

Los Splash Brothers vuelven a hacer temblar a sus rivales en la NBA. Anoche pusieron la puntilla a unos meritorios Memphis Grizzlies para llevar de nuevo a los Golden State Warriors a la élite de la liga con un triunfo por 110-96 en el sexto partido de la eliminatoria (4-2) de semifinales de conferencia. El equipo de San Francisco, que no llegaba a unas Finales de la Conferencia Oeste desde 2019, espera ya oponente. Saldrá del séptimo partido entre los Phoenix Suns y los Dallas Mavericks, que se disputa esta madrugada de domingo a lunes en España (02:00 horas).

Los Warriors vuelve a la élite gracias a Klay Thompson y Stephen Curry, a su fórmula elemental de la pasada década gloriosa. El primero, autor de 30 puntos, 8 rebotes y un 8 de 14 demoledor desde el perímetro, y el segundo, encargado de poner la puntilla contra Memphis con 29 tantos, 7 rebotes y 5 asistencias, llegan en plenitud física y mental, ambos dando señales de haber recuperado su sociedad de perímetro imbatible en el Oeste entre 2015 y 2019, cuando Golden State alcanzó cinco Finales de la NBA consecutivas.

Un parcial de 21-3 en el último cuarto, que terminó con un 32-19 capitaneado por ambas estrellas, castigó en exceso a unos loables Grizzlies que lucharon de nuevo a pesar de la notable baja de Ja Morant, su referente lesionado en la rodilla derecha. El intercambio definitivo arrancó con el paso al frente de Andrew Wiggins (18 puntos y 10 rebotes), que con dos canastas desenganchó a los Warriors en el marcador y dio muestras de su talla de All Star después de un encuentro con 12 cambios de liderato, un hecho notable tras los 8 totales que hubo entre el segundo y quinto partido de la eliminatoria.

Luego llegó el festín de Curry para levantar al graderío, que previamente lo había hecho con el fabuloso arranque de Thompson con un 5 de 5 en triples en la primera mitad del partido. El retorno del mejor Klay arengó a la afición en el tercer cuarto, a pesar de que las pérdidas, un total de 17, anularon el impacto de su 8 de 14 en triples. Del poco cuidado del balón vivieron unos Grizzlies venidos a menos en el rebote, aunque alcanzaron el último período muy metidos en la lucha por forzar el séptimo (78-77).

Golden State les sacó un 70-44 en rebotes y un 25-10 en el apartado ofensivo en el total del encuentro, números demasiado holgados para mantener opciones de ganar y alargar su temporada. Kevon Looney, con 22 rebotes totales, 11 de cada tipo, brilló en 35 minutos sobre la cancha, su máximo de carrera. 

Memphis batalló gracias a los 30 puntos de Dillon Brooks (7 de 15 en triples) y los 25 de Desmond Bane, especialmente inspirado en la segunda mitad. Tyus Jones, Jaren Jackson Jr. y Brandon Clarke, elementos clave en la eliminatoria, acumularon un pobre 9 de 41 en tiros de campo.

Más allá de las pérdidas, Golden State supo desplegar bien a todos sus activos, con notable mención de un Draymond Green pletórico y más agresivo en ataque de lo habitual con 14 puntos, 16 rebotes y 8 asistencias. El núcleo duro no falló a la cita si bien tan solo Thompson y Wiggins estuvieron finos en el tiro. Curry terminó con un 10 de 27 en tiros de campo y un 6 de 17 en triples, mientras que Jordan Poole no fue un factor desequilibrante con 12 puntos y un 4 de 15 en tiros.

Los Grizzlies tuvieron dos apagones brutales tanto en el ocaso de la primera mitad (53-51) como al final del partido. Estuvieron durante dos tramos de más de cuatro minutos sin anotar ninguna canasta, propiciando la recuperación de un oponente que no supo tampoco remachar hasta el tirón final de Curry, que hizo el gesto de mandarles a dormir a falta de 1:45 tras meter tres triples en cuatro minutos. Entre medio del bullicio desatado por el ’30’, Thompson metió su octavo y el Chase Center sabía de sobras que su equipo viajaría a las Finales de Conferencia con un partido marca de la casa.