De la semana fantástica del Athletic a una fantasmagórica


La situación del Athletic ha variado de forma contundente en el plazo de poco más de una semana. De la crisis de resultados generada por la marcha en la Liga de los leones, sin victorias tras la disputa de diez encuentros consecutivos, se pasó a un escenario de renovada ilusión e incluso euforia en apenas una semana. Siete días en los que los pupilos de
Garitano
derrotaron al Villarreal en San Mamés y al Valladolid en Zorrilla y, en medio, dejaron fuera de las semifinales de Copa al Granada. La semana fantástica, coincidimos varios medios de comunicación a la hora de hacer balance e incluso de titular.



Un parón brusco, obligado y necesario sacude ahora no solo la trayectoria del Athletic, sino al deporte mundial. La pandemia del coronavirus provoca, de momento, la suspensión de competiciones, torneos, ligas, copas, grandes premios y todo este tipo de eventos no solo a nivel profesional sino incluso aficionado. Con la salud no se juega. Ahora se trata de evitar contagios, de frenar el avance del maldito virus y de remar en la misma dirección. Ya habrá tiempo después para volver a ‘enfrentarse’.

La alegría del Athletic, volviendo al origen de esta reflexión, ha durado poco. Apenas unos días. Quizás haya sido el tiempo suficiente para que tanto Garitano como su plantilla y el propio entorno rojiblanco relativicen la trascendencia de eso que viene a llamarse ‘crisis de resultados’ o ‘crisis de juego’. Si alguien ha tenido las cosas claras a lo largo de estos últimos meses, ese ha sido el técnico deriotarra. Con sus fallos y sus aciertos, como todo el mundo.

Ahora se impone un tiempo de espera. El balón pierde protagonismo. Sus profesionales, también. El enemigo común es otro y las batallas se multiplican. A la semana fantástica le sucede el parón fantasmagórico. Calma.


Source link