Del despacho al hogar, la dura vida de una superheroína del siglo XXI

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“Patricia es igual que todos los jefes que han pasado por aquí, si le colgara un escroto sería vuestro ídolo”. Quien pronuncia esta lapidaria frase es Marisol, eficiente secretaria de Patricia Picón, la ambiciosa jefa de un banco de inversión que lucha, además, por ser una excelente esposa, la mejor hermana, una madre entregada y la amiga perfecta. Patricia es la protagonista de Supernormal, la nueva serie original de Movistar+, es una superheroína del siglo XXI, interpretada por Miren Ibarguren, o más bien, como dice la actriz, “una parodia de la heroína que se supone que debemos ser todas las mujeres, un reflejo de lo imposible que es ser aquello que nos habían planteado”.

¿CREES QUE ERES UNA ‘SUPERMUJER’?

Trabajadora de éxito, cuidadora de tu familia, amiga infatigable, hermana comprensiva… El día a día de una mujer del siglo XXI también tiene sus flaquezas y zancadillas.

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Muy en el fondo… ¿Amas o detestas a tu marido?

Mantengo la pasión

Doy por perdida mi relación

Depende del momento

La protagonista de Supernormal, Patricia (Miren Ibarguren) ama a su marido Alfonso (Diego Martín) pero, a veces, lo mataría.

¿Tienes una foto de tus hijos en tu oficina?

¡Por supuesto!

No, tengo de mi perro

Los llevo en la cartera

Patricia es jefa en un banco de inversión, pero no le falta en su despacho una foto de sus tres hijos.

¿Te comportas como una madre con tu hermana pequeña?

Sí, pero pasa de mí

No, no tiene remedio

Intento ayudar en lo que puedo

Isa (Bárbara Goenaga), aunque independiente, siempre ha sido como una hija para su hermana Patricia.

¿Tu secretaria/o es tu salvación en el día a día?

Sí, es mejor que Siri

Ya quisiera tener uno/a

Soy yo la secretaria/o

Gracia Olayo interpreta a Marisol, la ‘salvavidas’ de la protagonista de Supernormal.

Ante un compañero machista y bravucón, ¿qué haces?

Me hago pequeña

Intento sobrepasarlo

Lo ignoro

Patricia se crece ante las zancadillas laborales de otros compañeros de trabajo con actitud chulesca y fanfarrona. Ha aprendido a desenvolverse entre tiburones.

¿Eres la que organiza siempre los eventos familiares?

Sí, me gusta controlar todo

No, no me complico

Organizo y nunca disfruto

Nunca una reunión familiar termina como esperabas, que se lo digan a la protagonista de Supernormal.

Si recibieras un premio a Mujer del Año, ¿lo aceptarías?

Claro, me lo merezco

Sí, iría con mi marido

No, no tengo tiempo

Una revista premia la trayectoria de Patricia. Su marido le acompaña y ella no puede evitar pensar que debería ser él quien recibiera el premio.

¿Qué haces cuándo eres la anfitriona de una cena?

Disfruto junto a los invitados

Estoy siempre en la cocina

¡Paso de líos!

El personaje de Miren Ibarguren no se relaja en una cena en casa, debe controlar todo para que resulte perfecto.

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A lo largo de seis episodios, Supernormal relata con humor el perfil de una mujer contemporánea que busca lo mejor para su familia pero también el mayor éxito en su empresa; lo intenta, pero no siempre lo consigue. “Nos han vendido que podemos ser perfectas; madres, hijas, esposas, amantes y profesionales competitivas, siempre jóvenes y felices… Pues bien, esto es mentira y, sobre todo, es imposible. Patricia Picón, sin embargo, ha venido a este mundo a demostrar que sí se puede. Es ambiciosa, perfeccionista, inteligente, tenaz, cabezota, brillante… y muy infeliz. En su empeño por serlo todo, ha dejado algo muy importante por el camino: su propio bienestar”, cuentan Olatz Arroyo y Marta Sánchez, creadoras de Supernormal.

Todas somos Malasmadres

A lo largo de la trama, se van desglosando escenas de la vida cotidiana de la protagonista con resultados desiguales: un marido que es su salvavidas (Diego Martín), una hermana algo hippie (Bárbara Goenaga) a la que Patricia cuida como una hija, unos compañeros machistas que intentan acabar su carrera profesional… “Patricia Picón es una mujer muy ambiciosa en todos los aspectos, en la familia, en el amor, en la profesión, en la vida en general… Es muy inteligente y quiere hacerlo todo tan perfecto que ve cómo se le desmorona el mundo alrededor”, explica la actriz que la interpreta.

Miren Ibarguren interpreta a Patricia Picón, una mujer ambiciosa que compagina su vida familiar con un estresante trabajo en ‘Supernormal’, de Movistar+.

La serie Supernormal es un reflejo, con ironía y sabios diálogos, de lo que muchas mujeres viven a diario, en la estela del fenómeno social del Club de Malasmadres. “Este término ha sido una liberación para muchísimas mujeres, se puede aplicar a la vida de Patricia Picón”, añade Ibarguren. Según el último informe sociológico de la encuesta #Concilia13F de este club, el 67% de las mujeres trabajadoras declara no tener tiempo libre varias veces a la semana. Además, el estudio indica que aquellas que trabajan por cuenta ajena destinan más de 16 horas al día a la carga total del trabajo: siete horas y media al empleo remunerado, seis horas al cuidado de los hijos y más de dos horas a las tareas domésticas. “Patricia es una bestia, puta ama, como la llaman aquí”, afirma de nuevo, en uno de los episodios, su secretaria Marisol (Gracia Olayo).

Exuberancia narrativa y monólogos

El director de Supernormal, Emilio Martínez-Lázaro (Ocho apellidos vascos), plantea que es “una historia realista, alejada de los argumentos usuales de las series que, con tanta frecuencia, rozan la extravagancia argumental […]. Como indica su título, es una historia normal, pero elevada a la categoría de súper”.

A Patricia Picón (Miren Ibarguren) le faltan horas en el día para atender a su familia y ser jefa de un banco de inversión.
A Patricia Picón (Miren Ibarguren) le faltan horas en el día para atender a su familia y ser jefa de un banco de inversión.

A lo largo de cada episodio, el personaje interpretado por Ibarguren suelta de manera verborreica frases como: “Si tienes que lamer culos, lames culos, porque es más dinero, más prestigio y más poder”, “Yo trabajo y tengo dinero para que los míos sean felices”, “¿Quién fuera Wonderwoman para poder ir en leotardos a estas cosas [fiestas]”. Sentencias que ofrecen el perfil de la protagonista de una historia basada en escenas breves, muchos personajes secundarios y rápidos monólogos a cámara. Una exuberancia narrativa que llevan a Patricia Picón al límite en muchas ocasiones, pero que no dista mucho de otras muchas patricias de la vida real.


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