Sí, leer la prensa tecnológica en la última semana ha sido bastante brutal. Y sí, es posible que tú y tu startup aún estén perturbados por la crisis del Silicon Valley Bank o preocupados por lo que está pasando en First Republic. Demonios, aún podría estar trabajando para asegurar sus fondos en algún lugar nuevo.
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El cliché sobre la cantidad de lluvia durante los aguaceros existe porque las malas noticias tienden a acumularse cuando llegan. Que SVB implosionara mientras las nuevas empresas ya estaban luchando frente a un entorno de recaudación de fondos marcadamente más conservador, un pronóstico de OPI completamente despojado y antimonopolio que hacen que las fusiones y adquisiciones sean una venta difícil, por lo tanto, no es sorprendente, incluso si una crisis financiera se sintió como una acumulación injusta.
Pero las noticias no son del todo malas. En medio del caos, hay rayos de buenas noticias. Incluyen resultados sorprendentemente buenos de un par de informes de ganancias de compañías de software y un rebote desde los mínimos recientes de las valoraciones de software.
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