Un 8 de junio de 1970 muere el psicólogo Abraham Maslow, conocido como fundador de la psicología humanista, algo que todavía es seguido actualmente. Le rendimos homenaje para que descubras conceptos psicológicos con las 9 mejores frases de Abraham Maslow en el día de su muerte.
Lo conocemos por la llamada pirámide de las necesidades, donde están, en modo jerárquico, las necesidades humanas de mayor a menor prioridad.
La satisfacción de la necesidad de autoestima conduce a sentimientos de autoconfianza, valía, fuerza, capacidad y suficiencia, de ser útil y necesario en el mundo.
Para inventar o crear es necesario poseer la “arrogancia de la creatividad” que muchos investigadores han señalado. Pero si únicamente se tiene arrogancia sin humildad, entonces se es un paranoico. Debemos ser conscientes no sólo de las posibilidades divinas en nosotros, sino también de las limitaciones humanas existenciales.
Podemos orientarnos hacia la defensa, la seguridad o el miedo. Pero, en el lado opuesto, está la opción de crecimiento. Elegir el crecimiento en lugar del miedo doce veces al día, significa avanzar doce veces al día hacia la autorrealización.
Los estudios de personas mentalmente sanas indican que, como característica definitoria, les atrae lo misterioso, lo desconocido, lo caótico, lo desorganizado y lo que no tiene explicación.
La autorrealización es un proceso continuo. Significa tomar una por una todas las muchas decisiones sobre si mentir o ser sinceros, si robar o no en un momento determinado, y significa tomar cada una de esas decisiones como una opción de crecimiento. Es un movimiento hacia la autorrealización.
En resumidas cuentas, el músico debe tocar, el pintor debe pintar y el poeta debe escribir, si quieren vivir en paz consigo mismos. 9 mejores frases de Abraham Maslow
Yo quería demostrar que los seres humanos son capaces de algo más trascendente que la guerra, el prejuicio y el odio. Quería lograr que la ciencia considerara todos los problemas que los profanos han manejado: la religión, la poesía, los valores, la filosofía, el arte. Seguí con ellos intentando comprender a la gente grande, a los mejores especímenes de la humanidad que pudiera encontrar.
Si examinamos los deseos que, por término medio, tenemos en la vida cotidiana, comprobamos que tienen una característica importante: son generalmente medios para alcanzar un fin más que fines en sí mismo.
El único rival de uno son sus mismas potencialidades. El único fracaso es fracasar en vivir respecto a las propias posibilidades. En este sentido, todo hombre puede ser un rey, y debe, por tanto, ser tratado como un rey.
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