El batacazo de Argentina arrastra a Molina y De Paul: "Jugaron en modo Atlético"

El batacazo de Argentina arrastra a Molina y De Paul: "Jugaron en modo Atlético"

Arrancó la participación de los jugadores del Atlético de Madrid en el Mundial de Qatar. Y lo hizo con un resultado que pasará a la historia de las Copas del Mundo. Un resultado del todo inesperado que se ha cebado con todos los futbolistas de Lionel Scaloni, especialmente en el caso de lo dos futbolistas colchoneros que jugaron de inicio.

La selección argentina empezó el Mundial de Qatar 2022 con un batacazo inesperado, derrotado con dos goles en cinco minutos, entre el 48 y el 53, por Arabia Saudí (1-2), que levantó el 1-0 en contra en el minuto 9 de Lionel Messi, de penalti, para protagonizar la primera gran sorpresa del torneo, derribar la racha de 36 partidos internacionales sin perder de su rival y comprometer el pase de la Albiceleste.

Rodrigo de Paul, en el partido ante Arabia Saudí

Luca Bruno

Y en ese escenario, tanto Rodrigo de Paul como Nahuel Molina, no se escaparon de la foto de los señalados. Especialmente en el caso del centrocampista, que estuvo especialmente flojo. Una versión que recordó a la del Atlético de Madrid en estos meses, tal y como muchos se encargaron de recordar en las redes sociales.

En el caso de De Paul los números son claros. Fue el peor valorado por Opta entre los jugadores de campo, sólo le empeoró el ‘DibuMartínez. Tuvo un ratio de pases inusualmente bajo, con apenas un 76% de acierto. Más allá de eso, remató una vez, y ganó los dos ‘tackles’ que realizó. Y poco más, no dio ningún pase clave, ni generó ocasión alguna. De sus diez pases en largo sólo llegaron tres a destino. Tuvo 23 pérdidas de balón

A la hora de valorarles, los medios no tuvieron clemencia. En el caso de La Nación, tiene un ‘site’ para votar a los jugadores y en el caso de Nahuel Molina, la media un poco superior al 4, mientras que en el de De Paul, rondaba el 3 de nota. Casi notas calcadas con las que, por ejemplo, les otorgó el diario ‘Clarín’, uno de los más importantes del país. “Jugó en modo Atlético de Madrid. Apagado, poco claro, con escasa dinámica. Cometió muchos errores en el manejo del balón”, señaló sobre De Paul, al que le dio un 4.

Algo más compasivo fue con Nahuel Molina. “Se lo notó atado por momentos en su estreno mundialista, aunque por otros pasó bien hasta al fondo, pero no descargaron para él. El segundo gol de Arabia llegó por su sector”, señaló el conocido diario.

Argentina's Nahuel Molina goes for the ball followed by Saudi Arabia's Saleh Al-Shehri during the World Cup group C soccer match between Argentina and Saudi Arabia at the Lusail Stadium in Lusail, Qatar, Tuesday, Nov. 22, 2022. (AP Photo/Jorge Saenz)

Nahuel Molina, en el partido ante Arabia Saudí

Jorge Saenz

Y es que en el caso del defensa, el hecho de aparecer en la foto del segundo gol, le pasó factura también. “Quedó en la foto del 1-2 por un quedo increíble dentro del área, cuando deja dominar una pelota dividida a Al Dawsari sin siquiera molestarlo”, señaló ‘Página 12’. “En el segundo gol de Arabia, se quedó parado en la pelota aérea que cayó en los pies del rival, en lugar de ir a buscarla”, apuntó ‘Data Diario’.

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La agencia EFE, en su informe sobre la actuación jugador por jugador del combinado sudamericano, le dio un 4 a Nahuel Molina: “No había jugado un mal partido hasta el momento en que su equipo entró en una zozobra inexplicable, descompuesto de repente por el 1-1 de Arabia Saudí. El 1-2 deja malparado al lateral argentino, que aguardó demasiado, desconcentrado, sin la contundencia que requiere un balón sin dueño en el área, sin la determinación que exige un torneo de tanta dimensión como un Mundial, sea cual sea el adversario”.

Para Rodrigo de Paul, un tres. “Desconocido en el Atlético de Madrid, la selección tampoco repone la mejor versión del centrocampista, sin precisión, sin fútbol, sin visión, relegado a la intrascendencia en su estreno en el Mundial de Qatar 2022, con demasiados pases perdidas, con una volea propicia que mandó lejísimos de la portería, con una protesta constante al árbitro en cada acción, sin nada que lo salve del suspenso”.




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