El Celta empata y Òscar sigue en el alambre

Necesitaba un triunfo el Celta para calmar las aguas y dar un poco de oxígeno a su técnico, Òscar García, pero se tuvo que conformar con un punto tras el empate registrado ante el Elche en el Martínez Valero. El entrenador catalán sigue en el alambre tras un partido en que su equipo fue superior al rival pero que no supo materializar sus buenas sensaciones con goles.

Este Celta sigue apuntando maneras, pero los resultados no llegan y la situación cada semana se complica un poco más. Ante el Elche, el equipo vigués desplegó un futbol atractivo, generó grandes ocasiones de gol, pero confirmó una vez más que la suerte sigue sin acompañarle. Tras nueve encuentros, el cuadro celeste es decimoséptimo y puede caer en zona de descenso si el Huesca gana hoy al Eibar.

Penalti de VAR

A las necesidades del Celta se le unió la mala suerte en el inicio de partido. De hecho, el encuentro no pudo comenzar peor para el equipo vigués, al que el VAR le señaló un penalti en contra por unas manos inocentes de Hugo Mallo.

Elche-Celta, en imágenes

De Burgos Bengoetxea, tras verlo en el monitor, cumplió con las reglas y señaló la infracción, sin duda polémica viendo cómo se produjo. El defensa del Celta en ningún momento quiso aprovecharse de su brazo para controlar el balón, que tocó de rebote con su antebrazo, pero la norma este curso indica que aunque involuntarias, ese tipo de manos se deben penalizar.

Fidel, con una paradiña antes de lanzar, no falló desde el punto fatídico y adelantó al Elche.

Los franjiverdes se aprovecharon del momento y casi marcan el segundo con un cabezazo de Barragán, sin embargo el Celta, tras unos minutos descentrado, empezó a hacerse con el partido.

Los futbolistas de Òscar García acusaban su fragilidad defensiva, pero de medio campo en adelante combinaban bien para encontrar los pocos espacios que dejaba la tupida zaga del Elche.

Paradas de Badía

Poco a poco la maquinaria ofensiva del Celta se fue engrasando y la sensación de empate iba sobrevolando el Martínez Valero. De hecho, si no llegó antes fue por Édgar Badía y sus paradas.

Brais tuvo la igualada con dos ocasiones de oro, pero sus remates no pudieron con el guardameta del Elche, imperial en el mano a mano. Tras brillar ante Brais, el portero catalán no pudo detener un tiro raso de Santi Mina, autor del empate a escasos minutos del descanso.

Al Celta le quedaba media parte para conseguir un botín mayor y saltó al campo decidido a ir a por el partido. Los jugadores de Òscar se imponían en juego a un Elche que iba a menos y además gozaron de varias ocasiones para conseguir perforar la meta rival, especialmente con dos de Iago Aspas, pero ayer el delantero vigués no tenía su día y falló cuando lo tenía todo a favor.

Almirón, viendo el alud de fútbol del Celta, decidió mover el banquillo y realizó tres cambios de golpe, pero el Elche ya no tenía gasolina para mucho más y tuvo que dedicarse a no pasar apuros atrás.

El conjunto ilicitano supo ir cortando el juego para desespero de un Celta que vio interrumpido su momento y se tuvo que ir del Martínez Valero con un premio mínimo que da poco oxígeno a Òscar García.

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