Desde que era un niño que soñaba con este momento. Su crecimiento de los últimos meses le acercaba a la posibilidad de por fin sentarse en un F1 en unos entrenamientos libres de algún Gran Premio de F1. Por fin, Mick Schumacher tenía la oportunidad, a sus 21 años, de la mano de Alfa Romeo. Debía ser un día clave para su futuro. Si no cometía ningún error y aprovechaba la oportunidad, tenía más de un pie y medio en la parrilla de Fórmula 1 para el año que viene, en 2021. El momento parecía idílico: precisamente iba a debutar en Nürburgring, trazado de su país y en el que su padre, Michael Schumacher, sigue siendo el rey con 5 triunfos en la F1 en la historia de esta pista. Pero con lo que no contaba Mick es que sería el cielo el que le arruinaría el que debía ser su debut en la Fórmula 1.
Las nubes, el agua, viento y frío ya hacía días que avisaban de lo que podía suceder este viernes en el GP de Eifel de F1. Se preveía que el viernes sería difícil, con algo de agua y posibles condiciones mixtas para todo el fin de semana, aunque la previsión de lluvia era menor para la clasificación y la carrera. Sin embargo, Mick, con los ojos puestos en los primeros libres de Eifel, esperaba poder cumplir en su debut, aunque fuera sobre asfalto mojado. Pero ni así. Mick Schumacher se quedó sin rodar en los Libres 1 de Nürburgring por culpa del agua y la niebla.
El helicóptero no podía volar
La lluvia que cayó durante la primera media hora de la sesión impidió que los coches rodaran sobre el mítico trazado alemán. Y finalmente, apareció una segunda invitada que nadie esperaba: una densa niebla se apoderó del circuito y del sueño de Mick Schumacher, haciendo imposible que ningún coche pudiera rodar. La visibilidad era nula y los entrenamientos Libres 1 se tuvieron que acabar cancelando puesto que en dichas condiciones era imposible que el helicóptero médico pudiera sobrevolar el circuito.
Así, la importante cita que tenía Mick Schumacher tuvo que posponerse y habrá que esperar a que Alfa Romeo nombre el circuito en el que se espera que el alemán pueda por fin debutar en unos libres de F1. El actual líder de la Fórmula 2 deberá centrarse en gestionar su margen en la categoría de plata este fin de semana y esperar a conocer el día en el que por fin podrá materializar su ansiado debut.
Mick ya ha rodado en varias ocasiones en un F1. Participó en los test oficiales post GP de Bahrein el pasado año con Ferrari y posteriormente con Alfa Romeo. También condujo en 2017 el Benneton con el que su padre logró su primer triunfo en Spa. Este año, Mick pilotó el F2004 de su padre como homenaje en el GP1000 de Ferrari en la Toscana y unas semanas después pilotó junto a sus compañeros de la academia de Ferrari, Ilott y Shwartzman, un Ferrari de 2018 para prepararse para el test de este viernes. Finalmente, la lluvia y luego la niebla lo arruinaron. Mick Schumacher deberá seguir esperando.
También deberá esperar Callum Ilott, que por su parte debía debutar en unos entrenamientos libres de F1 este viernes por la mañana al volante de un Haas.
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