El área deportiva del Espanyol lleva semanas trabajando para configurar la plantilla de la temporada 2019-20. Uno de los puestos a cubrir será la portería, teniendo en cuenta que Roberto Jiménez acaba contrato el próximo 30 de junio y no renovará. Los técnicos están buscándole sustituto: quieren a un meta joven que pueda aprender al lado de Diego López. Además, la cantidad destinada para esta posición no es demasiado alta. Hoy por hoy, el primero de la lista es un viejo conocido de la afición perica: Edgar Badía. El canterano blanquiazul reúne todas las condiciones, tanto profesionales como económicas, que precisa la deportiva. Tiene 27 años, conoce a la perfección la casa y el director general deportivo, Òscar Perarnau, fue su técnico en el filial. Su actual cláusula de rescisión es solo de 50.000 euros hasta el próximo 15 de julio, al llegar al Elche en enero tras salir del Reus. Es decir, llegaría prácticamente con la carta de libertad. El Elche aún está en competición y una vez finalice, el 9 de junio, se podría hacer oficial el regreso del portero barcelonés al Espanyol.
Edgar Badía se hizo en las categorías inferiores del Espanyol. Llegó al fútbol base blanquiazul en la campaña 2009-10, jugó en el Juvenil A, Espanyol B y se entrenó con el primer equipo bajo las órdenes de Mauricio Pochettino. En la 2013-14 se fue al Granada B y en la siguiente campaña se fue al Reus, donde permaneció hasta el pasado enero.
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